Sanidad notificó tres nuevos víctimas mortales en la provincia de Ciudad Real en las últimas 24 horas, que elevan el número de decesos provocados por esta enfermedad hasta las 1.812, 17 de ellas en la última semana, que vuelve a disparar los datos de fallecimientos por COVID-19 hasta cifras de inicios de marzo del año pasado, cuando la provincia dejaba atrás la tercera ola de contagios por COVID que, entonces, en los peores momentos de la crisis sanitaria, provocaba casi un centenar de víctimas a la semana. 

La buena noticia es que el ritmo de contagios sigue frenándose en la provincia. A lo largo del jueves se detectaron 1.690 nuevos casos. En lo que va de semana, todos los días se han notificado menos contagios que en las mismas jornadas de la semana pasada.

Bajan los casos y baja la incidencia, aunque a un ritmo todavía lento en el ámbito provincial. El Instituto de Salud Carlos III apunta a un descenso de 70 puntos en 24 horas y se sitúa en 2.716 casos por 100.000 habitantes. 

En los hospitales de la provincia sigue una cierta estabilización de los datos de ingresos. En lo que va de semana el número de pacientes ingresados en cama convencional no ha superado la barrera de los 150 y, de hecho, este jueves había menos personas en planta que el miércoles. Bala la ocupación en Ciudad Real y crece en La Mancha Centro.

En las UCI, también estabilización de las cifras. En las unidades de críticos de la provincia hay 15 personas, el número de ingresos más alto de la región. Ocupan una de cada cuatro camas conectadas a un respirador. 

En los centros de mayores, los datos del Gobierno regional sitúan en 25 el número de residencias con al menos uno residente contagiado por coronavirus, de 160 que hay en toda Castilla-La Mancha, donde los mayores afectados son 1.686.