La Asociación de Vendedores de Mercadillo (Avamer) ha enviado un escrito a las alcaldesas de Ciudad Real y Puertollano, pidiendo que mantengan "abiertos los mercadillos y que amplíen la superficie de estos y las distancias de seguridad. Con ello evitarían tener que restringir el número de puestos y ayudarían a la supervivencia de muchos autónomos que venden en los mercadillos".

También piden que si se tienen que tomar medidas, estas sean en todo caso de restricción de los aforos, igual que en el resto del comercio, pero nunca de limitación de puestos. Asimismo, recuerdan que los mercadillos son grandes superficies de comercio al aire libre y por tanto mucho más seguras. Además, también se dirigen al Gobierno de Castilla-La Mancha, solicitando que se supriman unas medidas que consideran "discriminatorias" para su colectivo. Así, no entienden que los mercadillos "se cierren siendo comercio al aire libre y el resto del comercio en espacios cerrados permanezca abierto". Tampoco comprenden que los mercadillos "vean reducido drásticamente el número de puestos instalados y en el resto del comercio la limitación sea sólo de limitación de aforo de compradores". Por todo ello, piden "igualdad de trato y poder trabajar para mantener a sus familias", exigiendo a García-Page "que sea claro y diga si apuesta por los vendedores de mercadillos o por mantener la discriminación".