Los casi 36 kilómetros que separan Ciudad Real de Piedrabuena por la N-430 son, según el Real Automóvil Club de España (RACE), el tramo con mayor peligrosidad de la provincia. Así se desprende de los datos del Eurorapp 2020, un análisis que cada año realiza esta entidad y que relaciona el número de accidentes ocurrido en distintas vías con el número de vehículos que circulan por ellas. Se trata de un análisis en el que no existe ninguna carretera de la provincia entre las 50 más peligrosas de España, aunque sí hay un tramo clave para la capital, como es parte de la conexión con Toledo, por la N-401, pero en zonas de la provincia vecina y a partir del túnel de Los Yébenes.
De este modo, según los datos de RACE, que recopila cifras de los años 2017, 2018 y 2019, el tramo de la N-430 tiene un índice de peligrosidad de 45,2 y la sitúa en un riesgo bajo. Por ponerlo en comparación el último de los 50 tramos más peligrosos tiene un índice de peligrosidad de 54. Para ello se han tenido en cuenta los accidentes con heridos graves y mortales ocurridos en ese periodo y que se han puesto en comparación con la media de 3.914 vehículos que recorren el trayecto entre Ciudad Real y Piedrabuena cada día.
Además existen otros cinco tramos de la provincia de Ciudad Real que se encuentran en una zona de riesgo bajo o medio. Se trata de dos de la N-401, el que conecta Ciudad Real con Malagón, el segundo más peligroso de la provincia, y desde este municipio hasta Fernán Caballero, el cuarto más peligroso. Además se incluyen dos tramos de autovía, la conexión de Ciudad Real con Puertollano por la A-41, el tercero más peligroso, y la A-43 de Ciudad Real a Manzanares, el quinto, según el análisis de RACE. El último tramo con una peligrosidad baja o media es la conexión de Brazatortas con Puertollano por la N-420.
En cuanto a Castilla-La Mancha destacan cuatro tramos de carreteras en la provincia de Toledo, situados entre los 50 más peligrosos de España, incluida esa zona de la N-401 que conecta Ciudad Real con la capital regional. En España el tramo más peligroso se ubica en la N-240, en la provincia de Huesca. RACE ha analizado más de un millar de tramos de carreteras para elaborar este informe, incluidos otros 14 con unos índices de peligrosidad bajos.