No es habitual oír a Javier Márquez hablar de su equipo como favorito para ganar un partido, pero ayer se le intuyó ese optimismo en su tradicional análisis previo a los duelos del Vestas BM Alarcos. «Estamos en buena dinámica, y hay que alargarla», decía el manzanareño, cuyo mensaje compartía Martín Molina, el máximo goleador del conjunto: «El equipo está muy bien».
Después de encadenar siete jornadas sin perder, el Alarcos quiere más, y la visita al pabellón El Pandero de Palma del Río se presenta como una buena oportunidad para seguir sumando, y más cuando la dinámica de los cordobeses es totalmente opuesta. Tras dar la sorpresa y ganar en Sagunto, los palmeros han enlazado tres derrotas y un empate, éste en la última jornada en su casa y ante el colista Villa de Aranda después de remontar cinco goles de desventaja.
UNA VISITA MUY ESPECIAL
Se estaba dirigiendo a los medios de comunicación el argentino Martín Molina cuando irrumpía en el local un invitado muy especial, su compatriota Román Bravo (en el centro), exjugador del BM Alarcos y en la actualidad periodista especializado en su país. En plena luna de miel, no ha dudado en regresar a una ciudad a la que le tiene cariño y donde dejó mucho amigos.