Con el debate sobre la mesa del impacto que tendrá en la nómina de los ciudadrealeños el nuevo mecanismo de solidaridad intergeneracional puesto sobre la mesa, y firmado con los sindicatos, por el Ejecutivo para garantizar el futuro de las pensiones y en qué se traducirá finalmente la voluntad de derogar/modificar la reforma laboral, la realidad del mercado del empleo en Ciudad Real indica que hay casi 90.000 asalariados que al final de mes no consiguen llegar a cobrar el Salario Mínimo Interprofesional, esto es, 13.300 euros brutos al año.
Los datos son los que da a conocer la Agencia Tributaria, que ayer actualizó su estadística sobre el mercado del trabajo en España con los datos que recopila de la última declaración de la Renta disponible, en este caso, la de 2019, la del año previo al coronavirus.
La explicación a que el 45% de los ciudadrealeños no llegue a cobrar el SMI no es que exista un macrofraude en la contratación, se debe «a la temporalidad y la precariedad que sufre la provincia», explica el responsable de CCOO en Ciudad Real, José Manuel Muñoz. Dentro de esos salarios que no llegan a ser ni mileuristas se incluyen jornadas parciales como las que se dan en el campo para la recogida de la vendimia.
De hecho, según la Agencia Tributaria, el campo vuelve a ser el sector que peores sueldos tiene en Ciudad Real: apenas 6.700 euros al año debido a esa temporalidad que marca el propio trabajo primario, mientras que los profesionales con trabajos vinculados a sectores de la industria extractiva, la energía y el agua ingresan, de media, 28.505 euros, cuatro veces más.
Además de esa precariedad por la que atraviesan 90.000 asalariados de la provincia, la otra noticia que deja la actualización de datos de la Agencia Tributaria es que el sueldo medio de los ciudadrealeños sigue subiendo. Lo hizo por sexto año seguido. En 2020 se situó en los 17.715 euros, 342 más que en 2019 y 1.200 más de los que figuraban como ingresos de media entre los asalariados de la provincia. En un año ha aumentado el 1,9 por ciento, al filo de lo incluido en el Convenio de Negociación Colectiva 2021-2023. Si se echa la vista un poco más atrás, hasta 2016, la nómina de los empleados de la provincia, de media, ha crecido en 2.300. Ese año, 2016, y más en concreto el siguiente, 2017 es clave para encontrar el motivo de ese despegue salarial. El entonces Gobierno que lideraba Mariano Rajoy daba luz verde a la mayor subida del SMI en mucho tiempo, de un 8%. «Que suba el SMIdemuestra que es bueno para la economía, porque lejos del mantra que repiten los empresarios de que supone una pérdida de empleo, la realidad es que no es así, que hace que la economía circule mejor, porque hay más consumo, más producción y eso se traslada también al resto de los salarios, que crecen», explica el líder de CCOO en Ciudad Real.
125 privilegiados. Ese empuje hacia arriba afecta, también a los que más arriba están en la escala salarial. En la cima de la pirámide hay 125 ciudadrealeños que multiplican, por lo menos, por 10 el Salario Mínimo Interprofesional, esto es, que ganan de 130.000 euros al año para arriba. Su sueldo medio es de 184.047 euros. Doce meses antes, ese selecto grupo de asalariados ingresaba unos 162.000 euros, con lo que su incremento en la nómina supera el 13 por ciento.
Al igual que ocurre en otros años, los ciudadrealeños que más ganan son los que tienen entre 56 y 65 años, los que se aproximan a la edad de la jubilación. Se reparten una nómina media de 22.860 euros, mientras que los jóvenes, de 18 a 25 años, apenas llegan a ingresar 6.776 al final de mes. La brecha de género, por cierto, se acorta, aunque todavía supera los 3.000 euros: las ciudadrealeñas ganan, de media, 3.223 euros menos que los ciudadrealeños.