El equipo de Gobierno de Rosa Melchor tiene por delante cuatro años de legislatura en los que dará continuidad al trabajo realizado durante el último mandato para poner en marcha la plataforma logística intermodal de transporte, uno de los proyectos más ambiciosos en la provincia en las últimas décadas. El objetivo del Ejecutivo alcazareño es que los trabajos den comienzo antes de 2023, para lo que será necesario el desarrollo urbanístico de la cuarta fase del polígono industrial Alces, que dote a esta iniciativa de las infraestructuras necesarias y oferte suelo industrial ante la más que segura demanda de terrenos por parte de empresas del sector. El reto del Ayuntamiento de Alcázar de San Juan es lograr para el sector logístico lo que ya representa el potente sector agroalimentario en la región, y para ello confía en que la plataforma sea una realidad a medio plazo, especialmente tras la buena sintonía que existe en la actualidad con el Ministerio de Fomento en funciones. El Ejecutivo local subraya que su puesta en funcionamiento es fundamental para convertir a la ciudad en un punto estratégico de las exportaciones, que favorecerá el desarrollo económico y la generación de empleo en toda la comarca. El proyecto es tan ambicioso como complejo, especialmente en sus trámites burocráticos, por lo que el objetivo prioritario que se han marcado para esta legislatura es poder iniciar los trabajos. En este cometido tendrá un papel relevante el concejal de Promoción Económica y vicepresidente de la Diputación de Ciudad Real, Gonzalo Redondo, cuyo departamento está centrado ahora en la venta de las últimas parcelas de la tercera fase del polígono Alces, con vistas a desarrollar, en los próximos años, una cuarta de la mano de la plataforma logística. Redondo subraya que el Ayuntamiento está dando «todas las facilidades posibles» a los inversores para que instalen sus negocios en Alcázar de San Juan. En este sentido, el Consistorio ha segregado las parcelas más grandes en otras más pequeñas para incrementar la oferta de suelo para las pequeñas y medianas empresas. El concejal asegura que ya han vendido más del 50% de la superficie ofertada en la primera convocatoria, en abril de 2016, cuando se sacaron a licitación 65.000 metros cuadrados repartidos en 15 parcelas, que oscilaban entre los 750 y los 15.000 metros de extensión. El valor estimado de esos terrenos se sitúa en torno a los 2,8 millones de euros (entre 30.000 y 50.000 euros por parcela, según tamaño). En la última convocatoria salieron a licitación una decena de parcelas con una superficie que oscilaba entre los 2.000 y los 15.000 metros cuadrados. Las anteriores se han ido adjudicando con un precio de 37,45 euros el metro cuadrado. Las fórmulas también son flexibles. Los terrenos se pueden adquirir por venta directa, con una bonificación que puede llegar al 50% si la empresa cumple con unos objetivos de contratación e inversión; y través de un alquiler con opción de compra.