La criminalidad es uno de los componentes que se ha visto afectado, de forma transversal, por las distintas medidas que han buscado paliar la transmisión del coronavirus. Como muestra, los datos del descenso de delitos durante el confinamiento de la primavera pasado, o el estado de alarma de este invierno y que ha supuesto una caída drástica de algunos tipos de delito, como los robos o agresiones sexuales, al no poder circular en horario nocturno. Se trata de una caída solo de estos delitos, ya que en la comparativa global ha habido un incremento, del 0,4 por ciento, en las cifras de criminalidad del primer trimestre de 2021. 

De este modo, según los datos de criminalidad del Ministerio del Interior, las mayores caídas se han producido en robos como los que tienen violencia (40 por ciento menos), sustracción de vehículos (23,5 por ciento), robos en establecimientos (11,2) y hurtos (10,5). Caen todos menos los robos con fuerza en domicilios, que fueron los que más cayeron con el confinamiento, y ahora han aumentado un 7,9 por ciento. Igualmente ha habido un descenso del tráfico de drogas, un 57,1 por ciento menos, o las agresiones sexuales, que se han reducido en un 22,2 por ciento. Los incrementos se han producido por otras infracciones penales que elevan a 2.948 las contabilizadas en la provincia.

En el balance del primer trimestre destaca, además, que no ha habido homicidios, de enero a marzo, aunque en el siguiente balance aparecerá el fallecido en un tiroteo de la capital, así como secuestros, de los que hubo uno en los tres primeros meses del año.

Grandes municipios.

En los grandes municipios se ha seguido una tendencia contraria a la que ha ocurrido en el ámbito de la provincia y, de hecho, son varios los municipios que han visto incrementados los robos, sobre todo en establecimientos, así como los delitos sexuales. De hecho, Ciudad real, Puertollano y Tomelloso finalizan el trimestre con un aumento del 10 por ciento en los delitos, mientras que Valdepeñas y Alcázar de San Juan, han registrado un descenso del 20 por ciento. 

En esos aumentos, llama la atención que de enero a marzo se hayan duplicado los robos con violencia e intimidación en la capital, así como la sustracción de vehículos. Mientras, han caído a la mitad los robos en domicilios. En Puertollano se duplican los robos en establecimientos y también en domicilios y además se triplican las agresiones sexuales. Los robos en locales y en domicilios también crecen en Tomelloso, donde se triplican en el primer caso y se multiplican por cuatro en los domicilios. 

En el lado de los descensos destaca Tomelloso, donde además de una caída general de la criminalidad, del 21,3 por ciento, se han reducido a la mitad prácticamente todos los delitos de robo. Mientras en Valdepeñas se ha reducido en un 17,6 por ciento, sobre todo por una reducción de otro tipo delitos diferentes a robos o sexuales.