Un millar de agricultores del Campo de Montiel se van a beneficiar del proyecto de construcción de tres balsas de agua que van a permitir que lo que siempre ha sido una zona de cultivo de olivo de bajo rendimiento por su condición de secano, se convierta en un área de regadío. Lo han anunciado esta mañana el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, y Joaquín Páez, presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, cuenca de la que depende esta zona, tras la reunión mantenida esta mañana en Ciudad Real. Se trata de una inversión de 23,8 millones de euros que van a garantizar una reserva de agua de 11 hectómetros cúbicos, en un proyecto que podría ser una realidad antes de que finalice la presente legislatura en 2023.
Una parte de esta inversión se va a realizar con fondos procedentes del Plan de Recuperación de la Unión Europea, y el resto lo asumirán el Gobierno regional y la Confederación.
Para Martínez Arroyo, se trata de una gran noticia no solo para ese millar de agricultores del Campo de Montiel, que podrán disfrutar de una explotación de regadío por primera vez, sino también porque es una "herramienta muy útil para evitar la despoblación" de la zona.
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ponía en valor que "ya tenemos la seguridad y el compromiso de que con esta inversión y esa reserva de agua, se va a crear el germen y el núcleo del regadío en una zona en la que nunca ha existido". Joaquín Páez ha explicado que además del proyecto de construcción de esas tres balsas de agua, se va a trabajar de manera paralela en las concesiones para que los agricultores beneficiados tengan derecho legal a la utilización ese agua, fijando ese "horizonte de regadío" en el comienzo del año 2023. "Ahora ya podremos mirar a la cara a los agricultores sin tener que apartar la mirada", concluía Páez.
Además de esta actuación, la Consejería y la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir han anunciado la construcción de una depuradora en la localidad albaceteña de Alcaraz, con una inversión de 4 millones de euros.
Campo de Calatrava
Por otro lado, el consejero Martínez Arroyo ha recordado que en la planificación hidrológica del Guadiana se ha incluido de manera prioritaria una inversión en el Campo de Calatrava, concretamente en uno de los ramales secundarios de la Tubería a la Llanura Manchega con el que se podrá abastecer con agua superficial a estos municipios para el consumo humano. Una actuación que se realizará "de manera inmediata en cuanto pongamos en marcha el primer ramal de la tubería que ya está construido", algo que fechaba para febrero de 2022. La inversión prevista es de 35 millones de euros, lo que supone una "excelente noticia" para el Campo de Calatrava.