El presidente de la Denominación de Origen Valdepeñas, Antonio Torres, ha presentado su dimisión al frente de esta denominación, lo que atribuye a la carga de trabajo que supone y a las dificultades para compatibilizarlo con su empresa (es gerente de una cooperativa agrícola y gerente de APAG Guadalajara), al tiempo que descarta que tenga que ver la guerra abierta entre Félix Solís y García Carrión. 

Carlos Nieto, vicepresidente, se hará cargo ahora de esta denominación que celebró elecciones hace menos de un mes con críticas por parte de García Carrión. "Imagino que será una presidencia provisional al ser un vicepresidente y no sé si habrá otras elecciones o cómo surgirá el tema, ya lo que marquen los estatutos", añade en declararaciones a este diario.  

En relación a dicha guerra entre los industriales y la posibilidad de que haya incidido en su decisión, afirma: "No, eso era público, está en los tribunales y tendrá que ser lo que digan los tribunales, lo que pasa es que ante esta situación hay más trabajo de lo que podría dar una presidencia de una DO normal y corriente en cuanto a funcionamiento. Yo por mi forma de ser, para no hacer las cosas bien o no hacer las cosas como a mí me gusta, para estar a medias tintas, he preferido pedir la dimisión".

Dimite el presidente de la DO Valdepeñas

"Cuando uno va a un trabajo y ve el trabajo que tiene y el tiempo que hay que dedicarle, hay que tomar una decisión, si yo veo que con el tiempo que yo tengo disponible no voy a ser capaz de realizar ese trabajo bien, lo mejor es dejar a otra persona que lo pueda realizar bien. El tiempo que hay que dedicarle es importante", agrega el recién dimitido presidente, quien afirma que no ha tenido "presión ninguna". "O haces las cosas bien y le dedicas el tiempo que tienes que dedicarle, o si no lo mejor es dejar paso a otra persona que pueda dedicarle más tiempo, no es por otro motivo", asevera. 

Sobre el hecho de que no cumplirá ni un mes en el cargo y que ya entonces sabía de la carga de trabajo que podría implicar, comenta que aceptó la presidencia "sin conocer realmente lo que es la DO. Siempre he dicho que yo cuando fui a la DO la primera vez tuve que poner el Tomtom en el coche porque no sabía ni dónde estaba", dice tras reconocer que no sabe si caerá bien o mal su decisión y que considera que la DO tiene que seguir funcionando como una de las más importantes de España.