"Mi más rotunda condena a este nuevo crimen machista en Villarubia de los Ojos y mi cariño a la familia de la víctima". Estas son las palabras de condena del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras el asesinato de María Dolores Gozas, presuntamente por su pareja. La vecina de Villarrubia de los Ojos es la víctima número 43 de la violencia machista durante este año 2020.
"Defenderemos la vida de las mujeres sin descanso, pero es vital la implicación de toda la ciudadanía", indica el presidente del Gobierno en un mensaje en sus redes sociales, en el que recuerda que "solo desde la unidad acabaremos con la violencia de género".
El mensaje de Sánchez se suma a una serie de minutos de silencio y de comunicados de condena efectuados en numerosos municipios desde el suceso ocurrido el pasado domingo en Villarrubia. Entre ellas se incluye un comunicado publicado por Feminismos Ciudad Real, en el que señalan que "el feminicida era un hombre con antecedentes .Todas las alarmas deberían haberse activado".
"El feminicidio de Villarrubia es el último de una larga lista que ya supera las ochenta víctimas mortales en este fatídico año 2020 y más de mil desde el año 2013 en que se empezaron a registrar", indicaron en su comunicado en el que apuntan que "este feminicidio ha tenido los mismos antecedentes que otros muchos: el maltratador ya había ejercido la violencia con una pareja y una familia anterior y por eso tenía una orden de alejamiento también de sus tres hijos por violencia en el ámbito familiar cuando vivía en Daimiel". Desde Feminismos apuntaron que "en Villarrubia la historia se repitió , inicia una nueva relación en un pueblo diferente con Dolores Gozas Cárdenas, de 50 años y viuda, a quien ocultó o negó su culpabilidad en la sentencia de Daimiel y con la que comenzó el ciclo de la violencia con ella y su familia". Desde la asociación consideran que "en Villarrubia no constan denuncias contra él porque en el mundo rural, siguen faltando herramientas de detección y una población más concienciada sobre las violencias machistas". Por este motivo, apuntaron que "en nuestros pueblos la educación puede jugar un papel muy importante ya que es la única manera de llegar a tiempo, de enseñar a las mujeres que una relación de pareja no tiene por qué ser la única alternativa de vida, que debemos aprender a querernos y respetarnos, que una sociedad que calla es una sociedad cómplice de la violencia que sucede dentro de las casas y que o no sabemos o no queremos ver".