El comprador de 300 gramos de cocaína robada, en libertad

Pilar Muñoz
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Los hechos se destaparon de forma «casual» fruto de las pesquisas por «múltiples» robos que llevaron hasta un hombre que robó medio kilo de cocaína, implicó a su hijo y vendió la droga al que ha quedado en libertad provisional

Quedó en libertad provisional tras la vistilla celebrada en la Audiencia para resolver la prorroga de prisión - Foto: Rueda Villaverde

El hombre que guardaba en su caravana estacionada en Villarrubia casi 300 gramos de cocaína de una partida de medio kilo sustraído a terceros ha presentado a través de su abogado Miguel López un recurso de apelación contra la sentencia de la Audiencia Provincial que le condena a cuatro años y seis meses de cárcel por tráfico de drogas.

M. C. B., de 47 años y origen rumano, estaba en prisión provisional por esta causa desde septiembre de 2019. El juicio se celebró en la Audiencia Provincial el pasado 7 de septiembre y unos días después se dictó sentencia condenatoria. El día 28 se celebró una vistilla sobre la prorroga de prisión provisional, pero ese mismo quedó en libertad tras el argumento esgrimido por su abogado Miguel López.

El viernes 8 presentó el recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha contra la sentencia de instancia por «falta de motivación y defectos de forma», según ha podido saber este diario. El letrado sostiene que las escuchas telefónicas y el registro en la caravana vulneran derechos fundamentales y por ello pidió la nulidad de las mismas.

El Tribunal de la  Audiencia que dictó sentencia juzga probado que fruto de las pesquisas del Área de Investigación de la Guardia Civil de Manzanares por múltiples robos con fuerza se autorizó ‘pinchar’ el teléfono de A.M.A., de 20 años, y así se tuvo conocimiento de que su padre E. M. P., de 53, y otro sujeto no imputado en esta causa sustrajeron a personas no identificadas unos 500 gramos de cocaína. Se lo dijo a su hijo con el fin de que le buscara comprador, al tiempo que él hacía lo mismo. Fue un hallazgo «casual» fruto de la investigación por robos, que llevó a pedir la ampliación del tiempo y escuchas telefónicas. De este modo, se supo que entre el 23 de agosto y el 3 de septiembre de 2019 E.M.P. vendió a M.C.B. una parte substancial de los 500 gramos de cocaína por de 10.000 euros.

El Tribunal condenó a cuatro años y medio al comprador y al hijo de E.M.P., que pactó tres años.