La fábrica de Vestas en Daimiel ha finalizado la instalación de la nueva línea de producción de segmentos para las palas V136 y V150. El pasado mes de julio, la compañía había anunciado su elección como suministrador global de estos segmentos, también conocidos como Segment Wounded Root (SWR), que son las piezas que permiten unir la raíz de las palas eólicas con el hub del aerogenerador.

La fabricación en serie de los SWR implica además la contratación de 65 nuevos trabajadores fijos en la plantilla de Vestas Daimiel. La inversión, que ronda los 25 millones de euros, se ha dividido en dos fases. La primera, iniciada en junio, implicó la adquisición de un robot de pegado y una taladradora para la producción de segmentos en serie. La segunda fase, recientemente concluida, ha requerido la adquisición de más maquinaria destinada a doblar la actual capacidad de producción de segmentos en la planta. El director de la fábrica de Vestas, Roberto Meiriño, ha afirmado que “este nuevo proyecto supone una gran oportunidad y un reto para todos nosotros. El último año hemos podido mejorar las condiciones de la plantilla, pero hay que ser conscientes de que la competencia es muy alta: Podemos y debemos mejorar. Por la credibilidad que tenemos como referentes de una energía limpia y necesaria, pero también, no lo olvidemos, por nuestro futuro como fábrica. Competimos no solo con otras compañías, sino también con otras plantas de producción dentro de la compañía”.

La nueva línea de producción de SWR ha sido terminada pocos meses después de que la fábrica de Vestas en Daimiel inaugurase la producción de las palas V150, utilizadas en los aerogeneradores V150–4.2 MW. Ambos proyectos combinados han supuesto la contratación de 115 trabajadores indefinidos en los últimos meses, elevando el tamaño total de la plantilla por encima de los 1.200 empleados. De esta cantidad, aproximadamente 700 quedarían contratados como fijos. Al respecto, Meiriño ha comentado que “el aumento de contrataciones fijas es siempre un dato positivo y refleja la confianza de la empresa en nuestra productividad durante los próximos meses. En el sector eólico es además destacable porque es un mercado cambiante en el que el tamaño de las plantillas depende en buena medida del volumen de pedidos que tengas.”