Del pacto a la mayoría absoluta

I. Ballestero
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Los resultados del 26-M alejan de la espada de Damocles de los gobiernos en minoría a los futuros alcaldes de municipios como Tomelloso, Alcázar o Almagro, ahora en sólidas mayorías

Del pacto a la mayoría absoluta - Foto: RUEDA VILLAVERDE

La legislatura que acaba de terminar tiñó de color el mapa de las corporaciones locales de la provincia. El periodo 2015-2019 significó que el estribillo de la política municipal incluyera nuevos acordes más allá de la tarareada melodía del bipartidismo, y la conjugación de nuevas fuerzas políticas en un escenario tradicionalmente dominado por Partido Socialista y Partido Popular no siempre resultó fácil. Durante los últimos cuatro años, algunos de los alcaldes de los principales municipios de la provincia se han movido en precarias mayorías que han obligado a pactos de gobierno o a acuerdos puntuales para sacar adelante aspectos fundamentales de la gestión como la actualización de impuestos y ordenanzas o la elaboración de presupuestos. En algún otro caso, como Socuéllamos, el difícil equilibrio de la conjunción sin acuerdo de gobierno con otras fuerzas rompió pronto el espejo de la gestión con la pedrada de una moción de censura que cambió el color del gobierno formado apenas ocho meses atrás. Muchos de esos alcaldes y alcaldesas salen del paso por las urnas con mayorías absolutas, sin la espada de Damocles de las minoritarias mayorías.  

Hay varios casos paradigmáticos en ese paso del pacto a la mayoría. Quizá por la contundencia del resultado obtenido el más relevante es el de Tomelloso. Allí, Inmaculada Jiménez ha gestionado cuatro años al frente de una Corporación de 21 ediles con tan sólo ocho concejales, y ha tenido que trabajar duro el músculo del consenso para aprobar presupuestos y acciones para el municipio, muchas veces cimentadas sobre el apoyo o la abstención de otros grupos. Esa incertidumbre en torno a aspectos fundamentales como las cuentas anuales se disipan en el horizonte que abre el 26-M:gobernará con 12 concejales y una mayoría absoluta incontestable.

En otros municipios ese equilibrio de fuerzas de la pasada legislatura jugó en muchos momentos malas pasadas. Por ejemplo, en el caso de Alcázar de San Juan, donde la mayoría minoritaria de Rosa Melchor obligaba a buscar la muleta de los partidos ciudadanos para sortear obstáculos como los presupuestos o los avances en la remunicipalización de Aguas de Alcázar, donde la exigencia de los socios puntuales siempre ha ido por encima de la del equipo de Gobierno. De hecho, hubo varios cismas. Equo empezó formando parte del gobierno de Melchor hasta que la alcaldesa fulminó a sus socios por la disidencia interna en el Ejecutivo, e incluso en una ocasión los presupuestos esquivaron la prórroga por la vía de la Junta de Gobierno Local. La inestabilidad en formaciones como Izquierda Unida tampoco ayudó. Melchor tiene ahora mayoría.

Otro ejemplo fundamental es el de Almagro. Daniel Reina caminó siempre por la cuerda en las alturas de la mayoría minoritaria con precarios contrapesos para mantener el equilibrio:era alcalde en un municipio de 13 concejales con apenas cinco ediles en el gobierno. La disensión tuvo su cénit en un pleno de presupuestos en el que la oposición se alió en bloque para aprobar todas sus mociones y cambiar completamente las cuentas del Ejecutivo local. Ahora, con un PPtambién en división interna durante la última legislatura, gobernará en mayoría absoluta.

polos opuestos. Hay dos ejemplos que suponen las dos caras de la misma moneda de las mayorías precarias en la provincia en la pasada legislatura. Uno, el de Manzanares, que desde el principio asumió en su equipo de Gobierno a Miguel Ramírez (IU) para consolidar una suma suficiente en el Pleno local. El envés de la hoja dentro de los municipios más poblados fue sin duda Socuéllamos. Elena García ganó las elecciones por una exigua diferencia y se convirtió en la primera alcaldesa en la historia de la localidad con el apoyo en la investidura de UPyD, que apenas tardó ocho meses en cambiar su opinión de apoyar al PSOEsin entrar en el Gobierno a formar parte del Ejecutivo local con el PP en una moción de censura cuyos ecos han sido, desde luego, atronadores:Elena García gobernará en Socuéllamos con diez ediles en una corporación de 17 concejales.