Canastas de superación

Eduardo Gómez
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El Baloncesto en Silla de Ruedas Puertollano inicia una nueva temporada apelando a la humildad para superar las adversidades

La plantilla del BSR Puertollano posa antes de un entrenamiento. - Foto: Rueda Villaverde

Por duodécima campaña consecutiva, Puertollano contará con un equipo de baloncesto en silla de ruedas en la Liga Nacional. El BSR Puertollano Amiab comienza este sábado en la pista del Sureste Gran Canaria una nueva aventura en el Grupo A de Segunda División con un claro objetivo, el ascenso a Primera. Así lo asegura Ángel Pablo Sendarrubias, jugador y directivo del club, que no obstante considera que iniciar una nueva campaña puede considerarse ya un éxito. Y es que Puertollano tiene que competir con equipos de ciudades mucho más grandes y equipos con recursos, apoyos y patrocinios muy superiores a los que posee la escuadra industrial.  «Somos un club humilde, pero no nos podemos conformar», añade Reyes Romero, presidente de la entidad. 

Para ellos una nueva temporada supone también una nueva aventura. Un buen ejemplo es este primer desplazamiento a Gran Canaria, con las dificultades económicas y logísticas que implica. Las limitaciones presupuestarias marcan su día a día, pero ellos, acostumbrados a superar en su vida diaria todo tipo de barreras, ponen al mal tiempo buena cara para seguir disfrutando de su pasión.

La plantilla es muy heterogénea, con jugadores con discapacidades muy diferentes y una horquilla de edad que va desde los 25 años del único fichaje, Alberto Brox, hasta los 61 del más veterano, Paco Mora. 

Integrantes de la recién creada escuela del club.Integrantes de la recién creada escuela del club. - Foto: Rueda VillaverdeAl frente de ellos está Valentín Bastante, cuyo inicio en este deporte se remonta a la Asociación Lantana y que desde hace casi un lustro lleva las riendas del club industrial. «Tenemos muchas limitaciones, pero a cambio los jugadores le ponen muchas ganas. No faltan a ningún entrenamiento», recalca el entrenador.

En este equipo nadie cobra un euro y todos juegan por amor a la canasta, lo que no está reñido con una profesionalidad y una disciplina que les ha permitido ir creciendo año a año, hasta quedarse la pasada campaña muy cerca del ascenso a la Primera División. 

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Canastas de superación - Foto: Rueda Villaverde
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(el reportaje completo, en la edición impresa)