Liberbank espera retomar el reparto de dividendos y el programa de recompra de acciones propias cuando haya «más visibilidad» sobre el fin de la crisis del coronavirus, ha dicho hoy el consejero delegado de la entidad, Manuel Menéndez.

Liberbank no repartirá dividendo con cargo a los beneficios de 2019, siguiendo las recomendaciones del Banco Central Europeo (BCE), igual que el resto de sus competidores, y tiene previsto destinar esa cantidad, unos 22 millones de euros, a reservas.

Más avanzado el año, «cuando desaparezcan las incertidumbres causadas por la crisis del Covid-19», Liberbank volverá a analizar la situación y someterá a la aprobación de una nueva junta de accionistas la posibilidad de pagar el dividendo contra reservas.

En cuanto al programa de recompra de acciones que tienen en marcha, interrumpido momentáneamente por las citadas recomendaciones del BCE, hasta el momento han comprado 61,6 millones de títulos, valorados en unos 16 millones de euros, que representan en torno al 2 % del capital.

El consejero delegado hizo estas declaraciones en rueda de prensa remota para explicar las cuentas del primer trimestre de 2020, que recogen un recorte del 7,7 % en el beneficio neto, que queda en 19 millones de euros tras destinar 23 millones exclusivamente a paliar los efectos de la crisis, lo que sitúa las provisiones totales en 43 millones.

Según el ejecutivo, la entidad tiene suficiente capacidad para dotar más provisiones si es necesario en próximos trimestres.

En cuanto a los ingresos, el consejero delegado consideró que el margen recurrente de intereses podría crecer entre un 2 y un 3 % en el conjunto del ejercicio, apoyado en un mayor crecimiento del crédito, en el previsible aumento del euribor y en la mejora de las condiciones de los préstamos TLTRO del Banco Central Europeo (BCE).

El volumen global de la cartera crediticia terminará el ejercicio plano, en contra del incremento inicialmente esperado.

La nueva producción de préstamos a empresas y pymes crecería un 8 % incluyendo las líneas del ICO, que Liberbank está cubriendo en su totalidad en la parte que les corresponde, y siempre y cuando el Gobierno siga liberando tramos y complete los 100.000 millones de euros anunciados.

En ese caso, podrían acabar facilitando financiación por este canal por valor de 2.000 millones de euros. De momento, les había correspondido un volumen de financiación de 670 millones, que después se completó con otros 50 millones que no habían utilizado otras entidades, ha explicado.

También esperan una pequeña reducción de la cartera de créditos al sector público y en particulares esperan estabilidad, con una pequeña caída en hipotecas y créditos para consumo.

Y ya en 2021, la entidad espera una recuperación, que unida a la de la economía, se podría traducir en una vuelta al crecimiento del 5 % que convertiría a las hipotecas en uno de los productos principales de nueva producción.

Liberbank ha puesto en marcha un plan de actuación frente a la pandemia del coronavirus, basado en tres ejes de actuación: protección de la salud de empleados y clientes; atención de las necesidades de los clientes; y seguridad operativa. El plan de transformación digital iniciado hace tres años por la entidad es una de las estrategias de mayor relevancia e impacto en la consecución de los objetivos del plan frente al coronavirus.

En el ámbito de la protección de la salud, se ha extendido el teletrabajo (más del 90 por ciento de empleados de servicios centrales y filiales y el 48 por ciento de empleados de la red de oficinas); se han entregado equipos de protección personal a los empleados en atención presencial a clientes; se ha reforzado el servicio de limpieza y la evaluación de riesgos laborales, entre otras actuaciones.