La alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora anunció ayer que la obra de peatonalización de las calles Calatrava, Toledo y Feria concluirá a finales del próximo mes de enero si no hay alternaciones importantes en la ejecución de los trabajos. La regidora se expresó de esta forma ante los medios de comunicación en una visita realizada a estas obras. Antes de ello, la calle Toledo y Calatrava estarán totalmente transitable de cara a las Navidades.

La regidora realizó una vista a esta obra de la que detalló que ha supuesto una inversión de 735.000 euros, pero si mostró convencida de que “esta peatonalización no es una peatonalización cualquiera”. Así, subrayó que por medio de este proyecto, “estamos haciendo que Ciudad Real tenga elementos inclusivos”, por lo que “se cumplen los objetivos del equipo de Gobierno, que no haya ni un solo problema de accesibilidad en la calle”. Zamora señaló que una vez que concluya la obra, estas calles serán “un espacio vivo, un espacio dinámico”.

La alcaldesa insistió en que “este Ayuntamiento no va a dedicar un solo euro a arreglar una calle que en cuatro meses la tengamos rota, porque no hemos arreglado lo que no se ve”, por lo que apuntó que ese tratamiento de saneamiento se está aplicando en todas los proyectos de calles.

Las calles Toledo y Calatrava serán transitables en Navidad - Foto: Rueda Villaverde

La regidora apuntó que la obra continuará en la calle de la Rosa, con lo que “la plaza de la Constitución tendrán una nueva imaginación”.

Por su parte el director de la obra, Alberto Samper, se extendió en detalles sobre las técnicas urbanísticas que se están aplicando en este proyecto, de las que señaló que están “muy centradas en el medio ambiente”.

El técnico detalló recordó que el proyecto tiene como objetivo “renovar la calle poniendo al peatón en el centro de toda la actuación”, además de destacar una zona emblemática de la ciudad. Otra de las metas es que la movilidad “de todas las personas se pueda realizar de una forma totalmente segura y accesible”. En este sentido, recordó que al poner toda la calle en la misma altura, “las personas invidentes pierden las referencias”, con lo que “diferenciar la zona segura de la calzada es un problema”. Por esta razón, se ha contado con la ONCE “para cumplir estrictamente la orden de accesibilidad que está vigente y añadir medidas complementarias”. Así mostró las bandas de pavimento que separan la acera de la calzada, con un relieve de círculos que ayudan a orientarse a los invidentes. “También se han creado puntos de cruce específicos resaltados con banda direccional”, para facilitar el tránsito de estas personas.

Las calles Toledo y Calatrava serán transitables en Navidad - Foto: Rueda Villaverde

Samper insistió en las características vanguardistas de este proyecto, puesto que se ha levantado por completo el asfalto “para sustituirlo por un pavimento drenante verde”, que permite “drenar el agua en periodos de lluvia muy intensos”, que es la primera vez que se instala en Ciudad Real, así como un pavimento formado por adoquines ecológicos fabricados con un 30% de hormigón reciclado”, y que incorporan “un agente fotocatalizador, que al entrar en contacto con la luz solar lo que hace es degradar todos los contaminantes atmosféricos que hay en el aire”.

La obra ha servido también para renovar las infraestructuras de abastecimiento y saneamiento y su ampliación, mientras que en la calle Calatrava “hemos rehabilitado totalmente el colector de saneamiento mediante una técnica novedosa que es la segunda vez que se aplica en Ciudad Real”.

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Samper anunció que se instalará una nueva iluminación en la calle Calatrava, donde hasta ahora era deficitaria, la renovación del arbolado en toda la vía, y la jardinería en toda la zona, con “especies específicas para crear alcorques floridos”. Otra de las medias sera la sustitución de “todo el mobiliario urbano existente, con una nueva línea que cumplirá por completo la normativa de accesibilidad”.