La pandemia lo ha alterado todo. La COVID-19 ha puesto en liza el valor humano, la solidaridad y la empatía. Algo que no solo se ha podido comprobar entre semejantes, sino también en todos los ámbitos de la vida, desde el campo de la medicina hasta el de la economía. La crisis sanitaria ha supuesto una ruptura y un desafío al que empresas como Telefónica han respondido con responsabilidad y poniéndose al servicio de la sociedad y de las autoridades sanitarias para lo que pudieran necesitar.

Un compromiso que se ha transformado en acciones constantes y variadas y siempre atendiendo a las necesidades del momento. Un ejemplo es que la compañía presidida por José María Álvarez-Pallete creó un fondo de 25 millones de euros para realizar la compra de 150 toneladas de equipamiento sanitario, respiradores y EPIs en diferentes países con un gran esfuerzo logístico. Otra de las acciones consistió en ofrecer su músculo y conocimiento logístico al servicio de las autoridades sanitarias para conseguir y traer el material sanitario en cada momento. Fruto de este esfuerzo, en abril, Telefónica fue capaz de que 52 respiradores invasivos, los más necesarios en las UCIs, pasaran en 100 horas de la fábrica de China a estar disponibles en los hospitales españoles.

También cooperó, a través del programa #SumaFuerzas de Fundación Telefónica, en más de 100 proyectos con diferentes organizaciones, entidades sociales y administraciones públicas, junto con su red de voluntarios. Por ejemplo con Cruz Roja, realizando la donación de 500.000 euros para la creación de espacios para personas sin hogar; o con Banco de Alimentos en el programa Alimentando Solidaridad; o con Save the Children, UNICEF, Adopta un abuelo, etc.

Una Telefónica de todos

Por su parte, Vivo, en Brasil, realizó también una donación de 16,3 millones de reales en áreas de salud y para garantizar alimento a niños en situación de vulnerabilidad. Allí, Telefónica también colaboró realizando el despliegue de la red de datos para el hospital temporal de Sao Paulo, como también hizo en el de Madrid o en otras instalaciones de carácter asistencial.

Hacer un mundo más humano

Estas acciones responden a la esencia de Telefónica, reflejada en la propia misión de la compañía. Así lo subraya el propio Álvarez-Pallete: “La misión de Telefónica de ‘hacer nuestro mundo más humano, conectando la vida de las personas’ ha cobrado más relevancia que nunca. En una situación extraordinaria y totalmente inesperada, las redes de telecomunicaciones se han convertido en esenciales y nuestros equipos han trabajado en estrecha colaboración con las autoridades sanitarias y los agentes sociales para dar una respuesta responsable a todos nuestros grupos de interés”.

Con este compromiso, traducido en actuaciones durante la pandemia, Telefónica ha cumplido con su misión y por tanto con la estrategia anunciada hace un año, enfocada en construir una Nueva Telefónica. Una Telefónica al servicio de las sociedades de los países en los que opera. Una Telefónica para todos. #SeguimosCumpliendo