"Le dejaron KO en el primer golpe", «está vivo de milagro"

Pilar Muñoz
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La fiscal mantiene la petición de pena de 10 años de cárcel para cada uno de los dos procesados, que la acusación particular eleva a 12, mientras que las defensas piden la absolución

"Le dejaron KO en el primer golpe", «está vivo de milagro" - Foto: Rueda Villaverde

«Es milagroso que esté vivo». Así lo han asegurado los forenses que examinaron al hombre que ha sentado en el banquillo de los acusados a dos compatriotas rumanos por la paliza que asegura que le dieron la madrugada del 23 de marzo de 2014 en Pedro Muñoz y que le ha dejado secuelas de por vida: daño neurológico, pérdida de audición en el oído izquierdo y una incapacidad permanente absoluta.

Le dejaron KO en el primer golpe tras una discusión por una «tontería», afirmó la abogada Mar Camuñas que ejerce la acusación particular en representación del perjudicado y que pide la máxima pena por lesiones graves: 12 años de cárcel para cada uno de los dos procesados, una indemnización de 400.000 euros y la condena en costas. La fiscal mantiene la petición de diez años de prisión al considerar acreditados los hechos tras calificar de «abrumadora» la prueba directa de cargo.

Las defensas discrepan y piden la absolución al sostener que las lesiones son fruto de una «circunstancia accidental debida a la actitud agresiva del perjudicado» tras una trifulca. El abogado Dionisio Guijarro, que defiende a Valentín G., dice que el perjudicado se cayó y se golpeó la cabeza contra el bordillo. El letrado afirma que su cliente actuó «bajo una insuperable acción de miedo y se defendió», pero sin patearle la cabeza contra el bordillo.

"Le dejaron KO en el primer golpe", «está vivo de milagro" - Foto: Rueda VillaverdeSin embargo, los forenses fueron rotundos. La víctima recibió «múltiples impactos» y de «gran intensidad», aseguraron tras indicar que las lesiones que presentaba son compatibles con los puñetazos y patadas que le propinaron, según declararon en su día los testigos.

 Cinco años y siete meses después, ante el Tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, la mayoría de ellos no recordaba nada o al menos así lo han manifestado.

Para las acusaciones, en el juicio celebrado en dos sesiones han quedado acreditados los hechos. La fiscal, en su insondable alegato, aseveró que son incompatibles las lesiones que presentaba con una caída accidental porque tenía múltiples heridas y sin asistencia médica «no habría sobrevivido. No le dieron unas tortas ni golpes defensivos, fue una agresión intensa, sin posibilidad de defensa, estando ya tirado en el suelo». Unos golpes que le provocaron fracturas óseas, hemorragias. Estuvo en coma mucho tiempo, remarcó tras considerar probado que al encausado Valentín G. golpeó a Ioan C. y le pateó la cabeza contra el bordillo.

También cree acreditado que Ionut L. igualmente agredió al perjudicado tras una riña trivial en el bar El Calvario de Pedro Muñoz al salir en defensa de la camarera a la que estaba presuntamente molestando Ioan C. A juicio de la fiscal, los dos son autores de un delito de lesiones grave con secuelas de por vida.

La abogada de la acusación particular pide la máxima pena al entender que hubo ensañamiento, una agresividad «gratuita» contra la víctima tras quedar KO.