Martín cerrará su cuarto mandato con la deuda en 13 millones

A. Criado
-

El último Pleno ordinario de Valdepeñas dio luz verde a los informes de los planes económico-financiero y de reducción de deuda del Ayuntamiento, que será «residual» al término de la presente legislatura

Fachada del Ayuntamiento de Valdepeñas. - Foto: Rueda Villaverde

El último Pleno ordinario de Valdepeñas dio luz verde a los informes de los planes económico-financiero y de reducción de deuda del Ayuntamiento, que será «residual» al término de la presente legislatura. Así lo subrayó a La Tribuna, el alcalde de la ciudad, Jesús Martín, que hizo hincapié en que los diferentes gobiernos socialistas han conseguido reducir la deuda municipal a más de la mitad, de 27 a 13 millones de euros, desde que en 2003, hace 16 años, accedieran a la Alcaldía tras ganar las elecciones. Y todo ello, enfatizó el regidor, habiendo invertido en la localidad «más de 500 millones de euros». Jesús Martín, que recogió el bastón de mando de manos del popular Rafael Martínez del Carnero, recuerda que Valdepeñas contaba entonces con 26.000 habitantes, un presupuesto de 19 millones de euros y una deuda de 27. Ahora, cuatro legislaturas después, en 2019, la ciudad ronda los 32.000 habitantes, tiene un presupuesto de 31 millones y ha rebajado la deuda a 13, «un 47% sobre los ingresos netos consolidados». En realidad, apunta el alcalde, la amortización ha sido de 43 millones de euros, teniendo en cuenta el pago de facturas atrasadas y los intereses que iba generando la deuda. El regidor insiste en que la deuda es «residual», puesto que su pago se extiende a un horizonte medio de 15 años, lo que supone 866.000 euros anuales. «Con 27 euros por habitante saldaríamos ahora mismo la deuda», remarca Jesús Martín, que explica que el Ayuntamiento de Valdepeñas, a día de hoy, «podría solicitar un crédito a los bancos de hasta 28 millones de euros sin necesidad de tener que pedir permiso al Ministerio de Hacienda», ya que cumple con creces el nivel de endeudamiento marcado por la Ley de Estabilidad Presupuestaria, también conocida como ‘Ley Montoro’. Para Martín, las claves de este nuevo escenario económico residen en «el control del gasto y la deuda y en hacer caso a los interventores, los que saben de esto más que yo». Comenta que los convenios urbanísticos relanzaron las cuentas locales en la época de bonanza económica, pero se asumieron como ingresos coyunturales y no estructurales y «fueron fundamentales hace ocho años para que el Ayuntamiento aguantara los recortes sin tener que prescindir de ninguno de los servicios sociales que viene prestando». «Agotamos los 10 millones que teníamos en el banco, pero no sufrimos», apostilla. El alcalde valdepeñero explica que el Ayuntamiento «no ha solicitado ningún crédito en los últimos cuatro años» y, al mismo tiempo, «ha adelantado tres millones de euros más de lo previsto a la amortización de deuda». Además, el Consistorio cerró el pasado ejercicio con un superávit de 1,6 millones, de los que alrededor de 900.000 euros se dedicarán a inversiones financieramente sostenibles. Indica, en este sentido, que los proyectos, por «lealtad institucional», los seleccionará el equipo de Gobierno resultante de las urnas tras las elecciones del 26 de mayo, y que si se ha aprobado el presupuesto de 2019, «ha sido porque tenemos que justificar ante Bruselas la inversión municipal correspondiente a los proyectos de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible (Edusi)». En concreto, el presupuesto recoge inversiones por siete millones, pero dan libertad al nuevo Ejecutivo local para que lleve a cabo los proyectos que considere. Paralelamente a la reducción de la deuda municipal, Jesús Martín resalta la millonaria inversión realizada en la localidad a lo largo de estos 16 años, que cifra en «más de 500 millones de euros», procedentes de las distintas administraciones. Destaca, en este contexto, el margen de maniobra que ha ido ganando el Ayuntamiento de Valdepeñas en los presupuestos con el paso de los años gracias a una reducción de 14 puntos en el capítulo de Personal, que ha pasado de suponer el 54% del total de las cuentas al 38% de la mano de la progresiva implantación de la administración electrónica.