El Formac Villarrubia perdió en su visita al Nuevo Vivero por 2-0, una derrota que entra dentro de la lógica y a la que el técnico blanquiazul, Javi Sánchez, intentaba quitar hierro, pidiendo pasar página y centrarse en el siguiente partido. Tras finalizar el encuentro, el técnico del Villarrubia comparecía en rueda de prensa para valorar, en primer lugar, que “perdimos ante un rival mejor que nosotros. Veníamos con un plan que se nos fue al traste a los quince minutos. Quisimos quitarles el balón y les dimos las oportunidades ante un rival que no te perdona. Quisimos generar peligro, pero fue poco con el marcador en contra y con un equipo que no tenía prisa y que tiene todas las papeletas para estar arriba”.

Preguntado por algunos cambios en el once, el toledano argumentaba que “no pretendíamos nada en concreto con el once, pero queríamos hacer un partido largo para que a ellos les entraran las prisas, pero las prisas nos vinieron a nosotros y fue un partido que no estuvimos bien”. En este sentido, añadía que “en la segunda parte intentamos dar un paso adelante sin ese miedo a perder y no nos salió del todo. Tenemos que atrevernos desde el primer minuto porque venir a Badajoz y perder no es ninguna sorpresa porque es algo previsible. No nos salió y ya está. Encajamos el segundo gol cuando mejor estábamos. El Badajoz es un equipo con una calidad tremenda”.

Por eso, en líneas generales, “estuvimos muy desacertados, pero desde ya pensamos en el próximo partido y tenemos muy claro que esta no es nuestra guerra”.

Mientras tanto, el equipo blanquiazul se entrena en la mañana de este lunes para recuperarse del esfuerzo del pasado domingo. Esta semana toca descanso en Segunda B y Villarrubia y Socuéllamos podrían verse las caras esta semana en un amistoso de la Diputación aún por confirmar.