El Museo del Vino de Valdepeñas se someterá en los próximos meses a varias mejoras gracias al empeño de la Diputación de Ciudad Real, propietaria del museo, de conservar este atractivo turístico dedicado al vino de Castilla-La Mancha en perfectas condiciones. Con ese objetivo, la Institución provincial ha reservado una partida de casi 90.000 euros para llevar a cabo varias reformas necesarias. Así, por ejemplo, contempla en un contrato la realización de una serie de reparaciones en elementos deteriorados, como son los aplacados de la fachada, revestimientos de paredes y techos en la cueva, revestimientos de paredes en bodega y porche y reparaciones de superficies de hormigón en los muros y losas existentes en las cubiertas que dan a la sala de catas. Todo ello, sin olvidar además la reparación de fisuras y dotación de protecciones a las escalas de acceso a las cubiertas técnicas. Diferentes mejoras que se acometerán en un futuro cercano tras la visita hace ya unos días de los técnicos de la Diputación al museo para conocer cuáles eran sus deficiencias.  

No es la primera vez que la Institución provincial dedica parte de su presupuesto a mejorar el edificio del Museo del Vino. Cabe recordar que el año pasado dedicó una partida algo inferior (50.000 euros) al mismo fin.

El edificio que acoge el museo es propiedad de la Diputación, aunque la gestión está encomendada a la Fundación. Está construido alrededor de una de las bodegas protagonistas durante el auge exportador de los caldos valdepeñeros. Desde la Institución provincial se espera que el funcionamiento de este edificio monográfico se vea enriquecido con mejoras específicas que se sumen a los paneles didácticos, el laboratorio, la cueva de tinajas, a la colección de carros y a la prensa.

El Museo del Vino fue el primero que se abrió y puso en valor la Denominación de Origen Valdepeñas y el que ha mantenido su historia viva en estos años. La calidad de los vinos que se han desarrollado se refleja a la perfección en la estructura de la antigua bodega de Leocadio Morales y es una oportunidad de oro para transmitir su riqueza a las nuevas generaciones del mundo vitivinícola. Así, la promoción y difusión del vino español se podrá consolidar como una propuesta generosa que ya recibe al año más de 11.000 visitantes nacionales y casi 600 extranjeros de países como Francia, Italia o Reino Unido.

El museo. Este museo permite al visitante conocer la evolución de las prácticas culturales de la vid y la elaboración de los caldos a través de su edificio monográfico de una forma didáctica e interactiva. En su interior acoge toda la historia y tradición de la Denominación de Origen Valdepeñas, los esfuerzos, el trasiego hacia la calidad iniciado en la década de los años setenta y que ha desembocado en «la nueva generación de los vinos de Valdepeñas». En  él se exhiben las máquinas y utensilios que intervienen en la elaboración acompañados por la exposición permanente de fotografías realizada por Harry Gordondurante de la vendimia del año 1959 en la localidad de Valdepeñas.