El sector agrario sigue en pie de guerra y mantiene las protestas que inició a primeros de año. No tiene previsto parar hasta conseguir sus objetivos. El primero de ellos, se logró no obstante mediante la aprobación de un decreto por parte del Gobierno de España que prohíbe las ventas a pérdidas y que tiene por finalidad poner fin a los bajos precios que le pagan a los agricultores por sus productos. El segundo objetivo aún no se ha logrado. El sector agrario quiere que se mantenga el presupuesto de la Política Agrícola Común (PAC), que supone alrededor del 30 por ciento de la renta total de los agricultores y que inyecta cada año más de 200 millones de euros en la provincia.

Por este motivo, la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja) mantiene junto a UPA y Coag la protesta convocada para el próximo 9 de marzo con el corte de diversas carreteras de la provincia. Con esta movilización se quiere visibilizar el malestar que aún tiene el campo español, el cual no solo quiere el compromiso del Gobierno de España sino también el del conjunto de la Unión Europea, compuesta ahora por 27 países tras la salida de Reino Unido.

«Estamos molestos y preocupados porque mientras que todos los demás ejes se incrementan, el de la PAC disminuye y nosotros lo que pedimos es que se quede al menos en las mismas condiciones», afirmó a este diario el gerente de Asaja Ciudad Real, Agustín Miranda, quien recordó que esta primera semana de marzo era una fecha señalada como «muy importante» por las organizaciones agrarias, marcada en rojo para la continuidad de las negociaciones del club comunitario y que se centraron ayer en la Ley del Clima. Hay que recordar que el pasado 20 de febrero arrancó una negociación entre los Estados miembros que se cerró sin acuerdo y que dio paso a un maratón de reuniones bilaterales para tratar de buscar aliados.

En este sentido, el presidente nacional de Asaja, el ciudadrealeño Pedro Barato, explicó en días pasados en una entrevista con La Tribuna que existen dos corrientes: los defensores de los fondos de cohesión y quiénes apuestan por el presupuesto agrario. Para Barato, España debe alinearse en el eje Francia-Alemania-Comisión Europea y apostar por los fondos agrícolas, ya que mientras los fondos de cohesión implican que los estados miembros aportan el 50 por ciento de los fondos restantes, la PAC implica más dinero neto y «cohesiona tanto o más que los fondos de cohesión».

«Está clarísimo por cual hay que apostar», agregó Miranda, quien comentó que la posición contraria «saldría más cara y supondría desvertebrar el mundo rural, la agricultura y la España vaciada», apostilló el gerente de esta organización agraria, quien indicó que el campo no ha puesto fin a las manifestaciones «porque no hay acuerdo en las cumbres de la PAC», en las que «nos jugamos mucho». Asimismo, crítico que se les exigen muchos condiciones medioambientales y una gran cantidad de medidas para la lucha contra el cambio climático mientras que se recortan los fondos agrícolas y, al mismo tiempo, se abre la puerta a los productos de otros países ajenos a la Unión que no tienen estos condicionantes. «Se nos están exigiendo actuaciones por el cambio climático y respeto al Medio Ambiente y eso no se puede hacer con menos dinero. Si quieren agricultura de calidad y seguridad alimentaria se tiene que apostar de manera firme por la PAC», concluyó.