Mar, Pedro y Belén son tres seguidores incondicionales del Viña Albali Valdepeñas, tanto es así que fueron los primeros hinchas azulones en entrar en el pabellón Martín Carpena. Mientras otros aficionados vinateros aguardaban en las inmediaciones del pabellón, ellos optaron por entrar pocos minutos después de las cuatro de la tarde, luciendo desde muy pronto sus bufandas. 

Los tres siguen al Viña Albali en todos los desplazamientos, por lo que aseguran que la Copa de España «era una cita marcada en rojo desde que nos clasificamos».

«Prohibido perdérselo, no podíamos fallar», aseguran estos tres aficionados, que viajan por su cuenta, pero que destacan que la hinchada valdepeñera «es una piña. El fútbol sala une y aquí estamos».

«Ascendimos en 2018 y estar aquí ahora era impensable», explican. «Es un sueño que queremos vivir porque estamos haciendo historia». Por lo que pueda pasar, tenían reservado hotel en Málaga hasta el domingo y confesaban «tener los nervios a flor de piel» desde hace varios días.