Con su victoria en Pedro Muñoz ante el Deportivo Retamar (24-38), el BM Alarcos Ciudad Real se ha proclamado de manera matemática campeón de Castilla-La Mancha juvenil masculino, por lo que representará a la región en el sector nacional que se celebrará del 14 al 16 de mayo. Precisamente, el club que preside Juan Pablo Marciel tiene la intención de solicitar ser organizador de una de las ocho sedes en las que se resolverá esta primera fase nacional y de la que saldrán los ocho equipos que se disputarán el título en la fase final.

A falta de el último partido contra Cuenca, el conjunto de Jesús Herrero ha realizado una competición inmaculada, con nueve victorias en nueve jornadas. Además, dos de sus jugadores, Carlos Ocaña y Marcos González, ya han debutado con el primer equipo de División de Honor Plata. "Creo que hemos reunido un buen equipo, competitivo", resume su entrenador, que lamenta también la baja por lesión en la rodilla de Dani Fernández, natural de Villarrobledo y único jugador que no es de la capital o cercanías. Herrero se mostraba muy satisfecho con la evolución que han tenido estos jóvenes jugadores durante la temporada, especialmente los dos porteros, Asier Lizcano y César Manrique, éste hijo del histórico jugador del Caserío Vigón, BM Ciudad Real y Atlético de Madrid.