Endesa pide un rediseño de la tarifa eléctrica

Benjamín López
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Juan Sánchez-Calero sustituirá a Borja Prado como presidente tras una década al frente de la compañía, que busca crear una factura más barata e inteligente

José Bogas (i), consejero delegado, y Juan Sánchez-Calero, nuevo presidente de Endesa - Foto: Carlos Hoys

Endesa ha pedido al futuro Gobierno un rediseño de las tarifas eléctricas en España porque “son las más elevadas de Europa” y suponen un “obstáculo muy importante” para lograr la “electrificación” de la economía, según dijo el consejero delegado, José Bogas, en su discurso ante la Junta General de Accionistas celebrada en Madrid. Además el presidente saliente, Borja Prado, que deja el cargo tras una década al frente de la compañía, alertó de la posibilidad de caer de nuevo “en el fango de la crisis” si el país se paraliza por el “indeseable retraso en la formación del próximo gobierno o por un análisis erróneo de la gravedad de la coyuntura”.

Bogas, que con la salida de Prado de la presidencia, pasa a el máximo ejecutivo de Endesa, abogó en su discurso ante los accionistas por un rediseño de la tarifa eléctrica para hacerla “más barata e inteligente” ya que en la actualidad “casi la mitad de su importe se debe a sobrecostes de política energética e impuestos” ajenos al consumo de energía propiamente dicho. Además, dijo, tal y como están concebidas, no se favorece el consumo “en las horas del día en las que la energía es mucho más barata y las redes eléctricas se encuentran ociosas”.

A su juicio resulta “ineludible” tomar algunas “medidas de carácter regulatorio” que permitan alcanzar los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima. Una de ellas es la de “eliminar progresivamente” de la factura los costes ajenos al suministro eléctrico. Además Bogas cree que es preciso “repartir entre todos los consumos energéticos los costes de las primas a las renovables y a la cogeneración” ya que ahora solo lo pagan los consumidores de energía eléctrica.

También es preciso, añade, fijar un precio “razonable” a la distribución que haga posible desarrollar las “importantes inversiones en redes” -37.000 millones de euros hasta 2030- que contempla el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima.

 

El fanco de la crisis

Por su parte, el presidente de la compañía durante la última década, Borja Prado, aprovechó su discurso de despedida para alertar sobre la situación económica de España en la que tras el “excelente” trienio 2015-2017, dijo, “el crecimiento se ralentiza trimestre tras trimestre y la recuperación del empleo está, por lo menos, estancada”.

Así, añadió, aunque “aún estamos lejos de la recesión”, se observa un “cambio de tendencia” que debería llevar a todos los agentes económicos a “ponerse en guardia”. A su juicio, estamos “a tiempo de superar el bache sin graves consecuencias”, pero es necesario tomar “medidas preventivas y poner en marcha algunas reformas anti-cíclicas”. O se hace eso, dijo, o “volveremos a caer en el fango de la crisis en un abrir y cerrar de ojos” debido a un “indeseable retraso en la formación del próximo gobierno o por un análisis erróneo de la gravedad de la coyuntura”. Por eso pidió “a la clase política” que haga el “esfuerzo necesario” para dar estabilidad al país formando un gobierno “cuanto antes”.

El presidente hizo un balance muy positivo de sus diez años al frente de Endesa en los que, dijo, “ha sido la empresa eléctrica española más rentable para sus accionistas” con una revalorización media anual del 17 por ciento, a pesar de haber sido “injustamente tratada en demasiadas ocasiones”.

Además presumió de que Endesa es “de lejos” la eléctrica que más invierte en España. El año pasado, argumentó al respecto, generó un valor económico directo superior a los 20.000 millones de euros, tuvo una contribución fiscal directa e indirecta de 4.087 millones de euros y una contribución social, “más difícil de cuantificar, pero muy fácil de valorar”.

Prado pronunció su último discurso como presidente de Endesa, cargo en el que será sustituido por Juan Sánchez-Calero. Hoy, la Junta de Accionistas ha aprobado su entrada en el consejo como paso previo a su futuro nombramiento como presidente no ejecutivo de la compañía. Por eso, a partir de ahora el poder ejecutivo de Endesa recaerá en la figura del consejero delegado, puesto que ocupa ahora mismo José Bogas tras ser renovado en su cargo el pasado año.

 

Protestas

Los discursos de Prado y Bogas fueron continuamente interrumpidos por los gritos, pitos e insultos de los trabajadores de la empresa que accedieron al acto como accionistas tras haber comprado antes una acción de Endesa, según dijeron fuentes de la compañía. También fuera se concentraron varios centenares de empleados que celebraron hoy una jornada de 24 horas de huelga en todos los centros de España para protestar contra la decisión de Endesa de recortar los beneficios sociales -luz gratis- a 36.000 empleados, prejubilados y retirados.

A este respecto, Prado lamentó “profundamente” la situación de ruptura y enfrentamiento en que se encuentra la negociación entre la empresa y los sindicatos para un nuevo convenio colectivo. A su juicio es “un fracaso de todas las partes”, si bien mostró el compromiso de Endesa de poner “todos los medios” para alcanzar “lo antes posible” un acuerdo “justo y razonable” para todos.