El Ayuntamiento de Manzanares, a través de la asociación Pokhara, pondrá en marcha este año un programa de educación de calle para personas con drogodependencias. Una iniciativa que tiene como principal objetivo el acompañamiento y apoyo emocional a los vecinos mayores de 18 años que han desarrollado una dependencia a una o varias sustancias tóxicas, presentando a su vez altos índices de marginación social a nivel individual, familiar, grupal y/o comunitario. Con un presupuesto próximo a los 30.000 euros, este programa, que se desarrollará hasta el mes de diciembre (con opción de prórroga a 2021), actúa de manera socioeducativa y psicosocial a través de diferentes actuaciones realizadas en la calle, generando mejoras en la calidad de la vida del individuo (motivación al cambio, abandono del consumo, apoyo emocional en el síndrome de abstinencia...) con la utilización del trabajo social de calle como el primer eslabón de información, orientación, estímulo, acompañamiento y ayuda social mediante herramientas esenciales como la escucha, el respeto, la empatía, la participación y la cooperación. Las acciones impulsadas por Pokhara tendrán como prioridad el estudio permanente del entorno y la presencia sobre el terreno desde un punto de vista no institucionalizado; la adaptabilidad y mimetización en las zonas consideradas de mayor riesgo; la flexibilidad y capacidad de adaptación a las características de las personas con drogodependencias; la labor de acompañamiento, apoyo emocional y seguimiento de cada una de las personas con las que se trabaja; el aprovechamiento de los recursos disponibles en Manzanares, potenciando la acción comunitaria y el trabajo en red; y el enfoque integral y coordinado de las intervenciones, mediante la participación de estas personas, sus familias y los recursos comunitarios.

Actuaciones. El equipo profesional de Pokhara, formado por dos educadores de calle, llevará a cabo una serie de actuaciones semanales, para las que contarán también  con el apoyo del Ayuntamiento de Manzanares, que cederá aulas para su desarrollo y medios audiovisuales. Realizarán, en primer lugar, un estudio del entorno, un diagnóstico territorial y un análisis de la realidad. Tras una observación directa y regular, pondrán en marcha estrategias de espera, acercamientos progresivos y cercanía geográfica. Entre las actuaciones previstas también se encuentran la acogida al programa de las personas con drogodependencias y sus familias, el asesoramiento y la orientación, el apoyo emocional y familiar y el respaldo en la realización de gestiones en relación con las instituciones. Intervenciones a nivel familiar, visita domiciliaria, mediación, acercamiento a recursos ambulatorios y de tratamiento, acompañamientos a recursos locales y provinciales relacionados con las drogodependencias y la exclusión social, atención directa telefónica, coordinación con las administraciones y fomento de la red de recursos son otras de las acciones previstas con los beneficiarios de este programa.