El Caserío ha confirmado el fichaje del argentino Leo Werner, un internacional juvenil y júnior, hermano de Thomas, exjugador del equipo la pasada campaña y actualmente en las filas del BM Bolaños.
La llegada de Leo Werner, que puede desenvolverse en cualquiera de las posiciones de primera línea, coincide con la salida de la entidad del brasileño Marcos Braga, que llegó este verano procedente del Burgos.
Werner tiene prevista su llegada este viernes a Ciudad Real, por lo que su debut, si el técnico del equipo, Santi Urdiales, lo estima conveniente podría ser ya este mismo sábado (18.15 horas) en el Quijote Arena frente al Palma del Río, aunque apenas habrá podido entrenarse con sus nuevos compañeros. Éste será el último partido de la primera vuelta en este Grupo F de Primera Estatal, donde el conjunto ciudadrealeño es tercero empatado con el Bolaños, a cuatro puntos de la fase de ascenso, mientras que el Palma del Río es séptimo a cuatro puntos de los manchegos.
Javi Torre 'Jabato', jugador del equipo, ha asegurado que tras el largo parón navideño "es necesariio que haya cargas de trabajo y los entrenamientos suban el nivel de exigencia. Es duro, pero necesario", ha recalcado. Además, ha destacado la importancia de sumar los dos puntos en casa frente al Palma del Río para seguir en esa lucha por las posiciones de fase de ascenso. "En casa no podemos dejar escapar puntos", ha señalado. En lo personal, ha confesado que "siempre se puede aportar más. Me estoy adaptando a jugar en ataque en la posición de pivote y en defensa me estoy sientiendo a gusto".
EQUIPO FEMENINO. Por lo que se refiere a la escuadra femenina del Caserío, se jugará el liderato ante el filial del Pozuelo dentro del Grupo I de la Liga Territorial (sábado, 18 horas. Pabellón Rey Juan Carlos). Ambos conjuntos están empatados a 8 puntos y se jugarán acabar primeros esta primera fase y sumar unos valiosos puntos de cara a la siguiente ronda. Toni Fernández de Simón, técnico del equipo amarillo, ha subrayado la evolución de una plantilla prácticamente nueva y donde las más veteranas han tenido que ir adaptándose a jugar en posiciones diferentes. Todo ello con el objetivo de "consolidar un equipo femenino en la ciudad". Tras un mes sin competir y varias jugadoras afectadas por la pandemia, el preparador del Caserío no quiere excusas "`porque todos los equipos estarán en las mismas condiciones".
Por su parte, Iman Mulieh, jugadora del equipo, ha explicado que en el vestuario están "muy orgullosas y contentas" por el rendimiento del equipo en esta primera fase. "Somos un conjunto prácticamente nuevo y no esperábamos a estas alturas estar primeras. Sólo hemos sufrido una derrota y estamos realizando un gran trabajo, tanto las jugadoras que eran nuevas como las que ya tenían más experiencia", ha afirmado.