Hace justo un año, el sector agrario se movilizaba en toda España para reclamar precios justos para sus productos, una reivindicación que se frenó en seco a consecuencia de la pandemia de coronavirus pero que sigue estando vigente en el campo, que lo señala como el principal reto para este 2021. No obstante, no es el único, ya que el sector apunta también a otros desafíos como la nueva Política Agrícola Común (PAC) y el agua.
Así lo expusieron a este diario el gerente de la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja) de Ciudad Real, Agustín Miranda, y el secretario regional de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), Julián Morcillo. «Seguimos luchando por unos precios justos. No entendemos que se nos pague por debajo de los costes», afirmó Miranda, quien aseguró que los precios «sigue siendo «una reivindicación» del sector por la que seguirán luchando en la medida en la que deje la pandemia y también temporales como el de ‘Filomena’, dijo.
«Sigue siendo el reto principal», agregó Morcillo, quien señaló en particular la situación en cuanto a precios de productos como el aceite o el vino. «La Ley de la Cadena ya se ha aprobado y ahora el debate está en la transposición de la directiva europea», informó el representante de UPA tras subrayar que la cuestión de los precios «sigue siendo una batalla» en la que además no han ayudado las circunstancias del mercado, que debido a la pandemia ha afectado de manera importante al canal Horeca y ha dificultado la exportación de vino.
«El gran reto es el agua», afirmó también el gerente de Asaja Ciudad Real para poner de relieve a renglón seguido que «cada vez se está recortando más la capacidad de regadío» y que el sector agrario está haciendo «un esfuerzo tremendo» con la reducción de dotaciones y la transformación de cultivos y de regadíos. En este sentido, Miranda señaló que los recortes al riego vienen a «empobrecer la provincia» e implicarán ahondar aún más en la despoblación de los pueblos ante la falta de oportunidades, por lo que alentó a los ayuntamientos, la Diputación y otras administraciones a planteen alternativas frente a esos recortes al redagío para dar un futuro al sector y trabajo en los municipios.
También sobre el agua se pronunció Morcillo, quién reiteró que su organización ya calificó de «injusta» la reducción del 10 por ciento del régimen de extracción de agua en algunas masas de la provincia e indicó que habrá que llevar a cabo «una revisión de la situación de los acuíferos» tras los aportes de las lluvias y nevadas para ver si es posible revertir esa reducción de cara al inicio de la campaña.
En este sentido se pronunciaron también en relación al temporal y comentaron que si bien las nevadas y lluvias han sido buenas para el campo y suponen un aporte de agua, es necesario analizar en los próximos días el efecto que pueden tener las heladas en las explotaciones, con posibles daños en cultivo y el parón que ha supuesto para la recogida de aceituna.
El otro gran reto del sector pasa por la nueva PAC. «Hay que ver los cambios que vamos a tener», señaló Miranda, del mismo modo que Morcillo indicó que están ante «el momento decisivo»: la elaboración de la propuesta del plan estratégico nacional, en la que no será fácil el consenso pero en la que UPA confía en que se aproveche la situación para hacer «un reparto más justo, que se favorezca al agricultor profesional y a las explotaciones familiares, es decir, a quienes realmente su economía depende del campo». Así pues, confía en que «este año de nieves sea un buen año agrícola».