La patronal ve un remedio insuficiente el surtidor adaptado

M. S.
-

Molina, como portavoz de los gasolineros, reconoce que ésta es sólo una de las muchas demandas que vienen haciendo contra las estaciones desatendidas

La patronal ve un remedio insuficiente el surtidor adaptado - Foto: Rueda Villaverde

Dos meses tienen las gasolineras y gasineras de Castilla-La Mancha para contar en sus instalaciones con un surtidor adaptado para personas con discapacidad. Una medida que ha sido recibida con cierto sabor agridulce por parte de la Asociación de Estaciones de Servicios de Ciudad Real porque la nueva normativa responde «a una de las muchas demandas» que se vienen haciendo desde la Asociación Provincial de Estaciones de Ciudad Real, en relación a las gasolineras  «desatendidas». «Pero sólo a una de las muchas que se están haciendo», apunta el presidente de dicha asociación, Francisco Molina.

Como  responsable del sector entiende que esta medida deja en el aire todavía «demasiadas cosas». Lo dice por ejemplo,  porque esto  no resuelve los problemas propios que resultan de no contar con personal en este tipo de instalaciones. Mira a la nueva normativa para explicarlo. «Además de un surtidor adaptado, se les obliga a tener un servicio  para personas con discapacidad. Lo que nos parece muy bien, pero si no hay personal no sabemos en qué condiciones pueden estar esos servicios y eso es muy preocupante», explica. Molina hace esta pregunta desde la experiencia que le dan 27 años en el mundo de las gasolineras. «En nuestras gasolineras el baño se limpia cada hora y media,   y eso nos permite asegurar su buen estado. ¿Quién va a garantizar que los servicios de esas instalaciones van a estar en las condiciones que se requiere?».

Con esta medida, explica Molina tampoco se resuelve otro dato importante para el sector, los casos de derrame de combustible, que se da, para evitar la contaminación. «En las gasolineras habituales hay un protocolo para hacer frente a estos derrames. Primero hay que impermeabilizar el suelo, y después, cuando se vierte algo de combustible hay un operario que lo rocía con sepiolita que luego debe recogerse en unos contenedores apropiados. Si no hay personal, ¿quién se encarga de esos derrames en  las instalaciones sin personal?». Este tipo de detalles, para Molina básicos, son los que llevan a la asociación a creer que se trata en desigualdad de condiciones a las gasolineras tradicionales en comparación con las de autoservicio, en las que entran tanto las gasolineras desatendidas, las del las superficies de distribución y las de las cooperativas, que empezaron a expandirse hace ahora siete u ocho años, según sus cálculos.

Gasolineras más eficientes. Con esta pequeña batalla ganada, el sector afronta 2020 con optimismo. «En general creemos que éste va a ser un año muy similar a los anteriores, nos vamos a mantener, aunque la tónica seguirá siendo la de seguir trabajando para hacer cada vez más eficientes nuestras gasolineras». Según Molina la idea es que todos los establecimientos tenga una pequeña zona de tienda y hasta un rincón para tomarse un café, de tal modo que «los clientes encuentren en estas gasolineras un lugar para el descanso, para encontrar lo que necesitan».

Por el momento la apuesta por nuevos combustibles como la electricidad y el gas por parte de las fábricas de coches no les preocupa, porque el crecimiento de este tipo de vehículos «se espera que sea lento».  «Falta mucho tiempo para que este tipo de vehículos se desarrolle completamente. Las previsiones de coches eléctricos, por ejemplo, habla de llegar a un 5% de la población de cara a 2030». Asimismo, reconoce que esos mismos fabricantes están haciendo coche cada vez más eficientes y que contaminan menos, por lo que la gasolina y el gasóil, entiende que seguirán liderando los mercados.