El trapicheo de drogas y el robo han sido su 'modus vivendi' desde que era un chaval por su adicción a los estupefacientes. Por ello, son casi continuas sus entradas y salidas de prisión. Manuel S. M., de 44 años y alias 'el Algarrobo', ha vuelto a sentarse en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Ciudad Real acusado de un delito de robo con fuerza, por el robo de cinco almohadas de latex en un establecimiento del polígono industrial de Miguelturra. El ADN le delató. Al entrar por la fuerza en la tienda y romper el escaparate se produjo un corte, sangró y horas después los investigadores recogían en el escenario del robo restos de sangre, que una vez analizados delataron a 'el Algarrobo'. 

Tras apalancar las dos puertas del establecimiento sin conseguir abrirlas, forzó el perfil del escaparate hasta romperse. Una vez dentro se apoderó de cinco almohadas de latex y causó desperfectos en tres lámparas y en una chaiselong.

La Fiscalía pedía inicialmente por este hecho delictivo una condena de tres años y seis meses de cárcel, que ha quedado reducida a 30 meses de prisión.  

El fiscal del caso, Jesús Gassent, ha tenido en cuenta el reconocimiento expreso del delito de robo con fuerza cometido sobre la una de la madrugada del 14 de julio de 2017 y también que se está sometiendo a un tratamiento para dejar las drogas, según ha explicado el abogado Luis del Valle que le ha defendido por el Turno de Oficio.

Manuel S. M., que está en prisión por otros hechos, sigue teniendo cuentas pendientes con la Justicia y dentro de unas semanas volverá a la Audiencia Provincial de Ciudad Real para responder por hechos de similar naturaleza. Por ello, hoy ha entendido que más vale un mal acuerdo que un buen  pleito y ha suscrito el pacto de conformidad que le ha ofrecido el fiscal tras mantener una reunión con el abogado Luis del Valle. De este modo, se le ha rebajado la pena a dos años y medio de cárcel en lugar de los tres y seis meses que pedía el Ministerio Público inicialmente. 

'El Algarrobo' perpetró el robo en un establecimiento del polígono de Miguelturra un día después de que fuera firme la última sentencia condenatoria. De hecho actualmente cumple esa condena.

Aparte de esta pena, tiene en su haber otras sentencias condenatorias firmes: tres de 2013, una de 2015 y la de 2016. En algunos casos se ha suspendido la pena con la condición que durante un espacio de tiempo no volviera a delinquir, pero la naturaleza es la naturaleza u otros motivos que esgrime como su adicción a las drogas. En septiembre de 2014 se sentó en el banquillo con otros encausados por tráfico de drogas (un asunto de 2007). Entonces pactaron penas de entre uno y dos años de prisión