Un ciclista fue interceptado esta pasada madrugada, en torno a las 2.30 horas de la mañana, tras despertar las sospechas de los agentes de la Policía Local cuando circulaba por la calle Caballeros. El resultado del test antidrogas que se le practicó dio positivo y ahora deberá hacer frente a una importante multa que puede llegar a los 1.000 euros.
No fue el único conductor sorprendido en la noche de ayer por la Policía Local habiendo consumido drogas. A las dos de la mañana, una patrulla observó la circulación irregular de un turismo en la calle Tinte. Su conductor arrojó resultado positivo en drogas y también afrontará "una fuerte multa con detracción de puntos", según informa la Policía Local.
Un poco antes, a las 00:10 horas, en la calle Severo Ochoa, una patrulla detectó la circulación de un vehículo de forma irregular. Su conductor daba también positivo en drogas y, además, carecía de permiso de conducir; "por lo que responderá por delito contra la seguridad vial".