Caras serias y sensación de dura derrota la vivida esta noche en la sede del Partido Popular de Puertollano, formación que obtuvo el peor resultado electoral de su historia en unas municipales, quedándose únicamente con tres concejales tras perder cuatro respecto a las elecciones locales de 2015, si bien contaba con sólo seis ediles en la Corporación municipal tras la renuncia a mitad de legislatura de Joaquín García-Cuevas, que pasó a ser concejal no adscrito. Hasta ayer, el PP no había bajado de los cinco munícipes en la ciudad industrial y en 2003 logró 11, quedándose a uno del PSOE.
Su cabeza de lista y también presidente de la junta gestora que dirige el partido en Puertollano, Francisco Javier Luna, reconoció en declaraciones a los periodistas que el resultado de ayer «no lo esperábamos, sobre todo por la situación social y económica en que se encuentra la ciudad». Asimismo y tras dar la «enhorabuena» al Partido Socialista, puso de manifiesto que «desde mañana mismo (por hoy) vamos a ponernos a trabajar en el partido desde el primer momento y a seguir adelante. Empezamos una nueva legislatura y tenemos que trabajar duro en estos cuatro años que tenemos por delante».
Asimismo, Luna avanzó que una de las primeras tareas del Partido Popular será reunirse la junta gestora y la candidatura para ver qué rumbo darle a la formación de cara al futuro, y analizar los resultados de ayer, los peores de la historia en unos comicios municipales en Puertollano. No en vano, el PP se convierte en tercera fuera política y, por vez primera, no será el principal partido de la oposición.
El presidente de la gestora de los populares puertollanenses y cabeza de lista para el 26-M puso de manifiesto que la alta abstención registrada ayer, con un 42,19 por ciento, casi cuatro puntos más que en 2015, ha influido en el descalabro sufrido ayer, así como los resultados de las elecciones generales del pasado 28 de abril y la irrupción de nuevas fuerzas políticas. No en vano, a las municipales de 2015 concurrieron hasta ocho candidaturas en la ciudad minera, más que nunca, obteniendo representación seis de ellas.