La Agencia Tributaria y la Policía Nacional han desarticulado "la organización más activa" en la importación y tratamiento ilegal de gases fluorados, que empleaban para refrigeración y que han provocado la emisión de toneladas de gases a la atmósfera sin autorización.

Según un comunicado de la Agencia Tributaria remitido este jueves, esta operación bautizada como "Verbena" y realizada en colaboración con la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude se ha saldado con cinco personas detenidas responsables de emitir a la atmósfera de forma irregular lo equivalente a 234.000 toneladas de dióxido de carbono.

Cae red que permitió emisión de gases contaminantes

Es la mayor operación a nivel europeo realizada hasta la fecha contra el fraude de gases de efecto invernadero, con la intervención de más de 27.000 kilos de gases fluorados, que tenían un valor de mercado de 250.000 euros, y el descubrimiento de más de 180.0000 valorados en más de un millón de euros.

La organización, a través de un complejo entramado empresarial, se dedicaba a importar, comercializar y distribuir de forma irregular estos gases, incumpliendo la normativa comunitaria.

Las investigaciones comenzaron a partir de las inspecciones practicadas en dos naves industriales ubicadas en Almagro (Ciudad Real) y Campo Real (Madrid) que habrían descargado dos contenedores de botellas de gases fluorados importados sin cumplir los requisitos establecidos reglamentariamente.

En total, se han intervenido de forma cautelar de 2.126 botellas, equivalentes a más de 27.000 kilos de gases fluorados, al tiempo que fueron encontradas 1.068 botellas vacías ubicadas a la intemperie, estando algunas de ellas prohibidas por la Unión Europea, con independencia del gas contenido.

Por último, se localizó un número indeterminado de botellas seccionadas por la mitad emitiendo directamente el gas residual a la atmósfera y suponiendo un grave peligro.

A todo ello se sumaron diferentes irregularidades administrativas relacionadas con la manipulación de recipientes, el etiquetado y repintado de botellas y la gestión de residuos, entre otros.

GASES IMPORTADOS DE CHINA

El "modus operandi" de este grupo criminal consistía en la creación de empresas a nombre de testaferros dedicados a la importación de gases fluorados de China, eludiendo los controles aduaneros, que se almacenaban en los dos citados almacenes y distribuían mediante una empresa de logística a clientes de España, Alemania, Francia, Portugal y Senegal.

La mayoría del gas importado se trata de R134A, que tiene un potencial de calentamiento atmosférico de 1.300, lo que significa que una emisión de una tonelada equivale a la emisión de 1.300 toneladas de dióxido de carbono.

En el marco de esta operación, se inspeccionó un establecimiento comercial de un cliente final, en Tarragona, averiguando que se habría distribuido género previamente intervenido de manera cautelar, botellas de gases fluorados que no contenían el gas etiquetado y facturado, para lo cual se manipuló el recipiente.

Todo ello había sido llevado a cabo con ánimo de lucro, ya que la botella facturada tiene un valor seis veces superior, y evadiendo la carga fiscal asociada.