Los vehículos sin etiqueta no podrán acceder al centro

Manuela Lillo
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Serán los primeros a los que se les impondrá este veto si bien se excluye a los residentes, de emergencia o movilidad reducida

Los vehículos sin etiqueta no podrán acceder al centro - Foto: Fotos Rueda Villaverde

El diseño de la futura Zona de Bajas Emisiones (ZBE), el 'Ciudad Real Central', va tomando forma poco a poco, de manera que ya se confirman aspectos que  se habían esbozado y que ahora se han determinado por parte del Ayuntamiento, como que el sistema de implantación de esa zona, que abarcará todo el interior de la ronda, será el de las etiquetas ambientales de la DGT, de manera que los vehículos que no la tengan serán los primeros que tendrán prohibido el acceso a esa área a partir del año 2023, cuando la ley de Cambio Climático fija la puesta en marcha de esta zona. En concreto, se trata de los turismos y furgonetas de gasolina matriculados de manera orientativa antes de enero del 2000; de los diésel anteriores a enero de 2006 y de las motos y ciclomotores matriculados de forma previa al año 2003.  

La portavoz del equipo de Gobierno y edil de Sostenibilidad, Mariana Boadella, confirmó a este diario la utilización de ese sistema de distintivos y añadió que es la fórmula que recomienda la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) en una guía que se tendrá en cuenta a la hora de poner en marcha la zona que limitará la entrada a los vehículos más contaminantes, de la que estarán excluidos -dijo- los de residentes, los vehículos de emergencia o los de movilidad reducida, del mismo modo que se podría plantear la exclusión de coches de empresa y otros. 

Y es que la puesta en marcha de este 'Ciudad Real Central' se implantará de forma progresiva, con la elaboración de una ordenanza municipal y de un calendario de implantación que el Ayuntamiento quiere que sea participativo, a través de los distintos consejos sectoriales o del Consejo de Ciudad con el que cuenta la capital. 

En esa hoja de ruta para hacer realidad la Zona de Bajas Emisiones, a la que obliga la Ley de Cambio Climático a todas las ciudades de más de 50.000 habitantes, no sólo se seguirán las recomendaciones de la FEMP para «armonizar» un sistema más o menos unitario en todas estas ciudades españolas, sino que también se hará uso de la señal que ya aprobado la DGT para definir la mencionada zona que cerrará la puerta a los vehículos más contaminantes. 

Se trata de una señal que ya contempla que los vehículos 0, los Eco o los C podrán pasar sin problema a la zona restringida y que, aunque excluye los de distintivo B, en Ciudad Real podrán seguir accediendo, al menos al inicio de su implantación, cuando sólo se vetará a los vehículos de no residentes que carecen de etiqueta. 

  Otra cuestión que se deberá abordar a propósito de esa área, que implicará un cambio en la movilidad de la ciudad, será la relativa a los vehículos de mercancías, para los que Boadella ya adelantó que se firmará un convenio con el sector con el fin de reducir su impacto en la ciudad, puesto que se calcula que el 35% del tráfico de la capital corresponde a este tipo de vehículos. La pretensión del Consistorio es que se favorezca el uso compartido de vehículos, puntos de reparto comunes o medios de transporte bajos en emisiones para el llamado 'último kilómetro'. 

Para poner en pie toda esta zona el Consistorio ya ha remitido al Ministerio de Transporte los dos proyectos con los que opta a captar hasta 5,5 millones de fondos europeos.