Entrevista Sara Oropesa

Hilario L. Muñoz
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«Trabajar ante un virus desconocido ha generado incertidumbre y algunos profesionales decidieron separarse de sus familias»

Entrevista Sara Oropesa - Foto: Rueda Villaverde

Sara Oropesa es enfermera del servicio de urgencias en el Hospital General Universitario de Ciudad Real. Enfermera por amor a la profesión, ya que ingresó por circunstancias académicas en la escuela, pero tras hacer las prácticas de primero en una residencia, se enamoró de la profesión. En septiembre de 2019 fue elegida como delegada de Satse en el centro sanitario y en enero fue designada responsable provincial del sindicato. Desde este cargo le ha tocado vivir la actual crisis sanitaria, se ha reincorporado a su trabajo en el centro sanitario en los peores momentos de la epidemia y ha vivido de cerca las necesidades que los profesionales de la enfermería han tenido.

 

En primer lugar y, desde un plano personal, ¿cómo vive la actual epidemia? ¿Se imaginaba ver algo así en su vida? ¿Siente algún temor cuando se aproxima a los centros sanitarios estos días?

La pandemia de la COVID-19 nos ha pillado a todos por sorpresa y personalmente nunca hubiera imaginado vivir algo así en la vida, es algo que veía posible pero muy lejano. No vivo con el temor de ir a los centros sanitarios, creo que, siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias, entre todos, hemos conseguido frenar la curva y el número de contagios. Quedarse en casa y unas normas básicas de higiene han frenado este virus.

 

¿Qué labor desempeña Satse en estos momentos?

Satse siempre ha representado y defendido a los profesionales y durante esta pandemia más. Además, todos los delegados sindicales de Satse de la provincia nos hemos incorporado a nuestros puestos en los centros sanitarios, compatibilizando la labor  asistencial con la actividad sindical durante los ratos de descanso que nos dejaba el trabajo. Todos hemos hecho un gran esfuerzo por seguir ayudando a los compañeros. Nos hemos centrado durante estos meses en informar y reclamar condiciones laborales adecuadas para los profesionales, exigiendo formación, aumento de plantillas y unos EPIs adecuados. Hemos estado con las enfermeras, fisioterapeutas, especialistas y con los profesionales en formación como los EIR y los alumnos de grado que se prestaron como auxilio sanitario en los peores momentos.

 

¿Cuál es la situación de los profesionales? ¿Cómo se encuentran de ánimo?

Los profesionales se encuentran cansados, tanto por la alta exigencia laboral que han sufrido como por la falta de descanso y añadiendo a esto el estrés de unas condiciones laborales mejorables y la falta de medios de protección. Los profesionales nos han ido comunicando la falta de EPIs y así lo hemos denunciado ante las gerencias y a la Inspección de Trabajo en los casos oportunos.

 

¿Se puede decir una cifra de cuántos profesionales de la enfermería se han visto afectados por coronavirus, bien en la región o en la provincia?

No disponemos de datos concretos, ya que a pesar de solicitarlos a las gerencias y a las administraciones en múltiples ocasiones no se nos han facilitado.

 

¿Qué echa de menos Satse de la administración estos días?

Nos hemos dirigido a la administración en múltiples ocasiones, sobre todo, por la falta de información. Los delegados de Satse somos los más cercanos a los profesionales en los mismos centros sanitarios donde hemos estado trabajando y echo de menos que en estos momentos de crisis no haya habido una mayor colaboración.

 

¿Qué le parece la decisión del Gobierno regional de no abrir hospitales de campaña en Castilla-La Mancha y tratar de ‘estirar’ al máximo los hospitales?

Fue una responsabilidad de la administración regional y en ese caso hubiéramos tenido que actuar y valorar las condiciones de trabajo de los profesionales.

 

¿Cómo se puede recuperar la sanidad de una situación tan excepcional en la que se han puesto todos los recursos al servicio de una única enfermedad?

La sanidad pública es la base de la salud de la población y no se ha dejado de lado ni en los momentos más críticos. El grandísimo trabajo de los hospitales se ha visto complementado con la Atención Primaria donde sus profesionales se han adaptado a las circunstancias y han continuado atendiendo a todos los enfermos con los medios a su alcance, sobre todo, a través del teléfono y acudiendo a los domiciliarios en los casos que era necesario. Reconozco la gran labor de todos mis compañeros durante esta crisis sanitaria.

Se habla de familias separadas por el coronavirus, de profesionales que duermen en habitaciones separadas para evitar el contagio o de esas residencias para que los sanitarios no viajen.

¿Cómo se sostiene una situación así durante meses?

Los profesionales han hecho un tremendo esfuerzo acudiendo a trabajar ante un virus desconocido hasta hace pocos meses y eso ha generado incertidumbre, por lo que algunos decidieron separarse de sus familias, lo cual reafirma su excelente profesionalidad. El compromiso, capacitación y responsabilidad de las enfermeras de nuestro sistema sanitario está fuera de toda duda y en esta crisis lo están demostrando de manera sobrada.  Nuestra fortaleza mental es harto conocida, ya que durante nuestra experiencia profesional estamos acostumbrados a tratar con pacientes y sus familias en los buenos momentos, pero también en los malos y siempre tienen a su lado a una enfermera.

 

La ciudadanía se ha volcado con el personal sanitario (tejiendo máscaras, usando impresoras 3D...). ¿Hasta qué punto se utiliza este material que en algunos casos no está homologado? ¿Cómo se pueden agradecer estos gestos de generosidad?

El material donado ha sido de gran ayuda en todos los niveles. Es de agradecer a todas las personas que han gastado su tiempo, materiales y dinero en proteger a los profesionales sanitarios en los peores momentos de crisis sanitaria y lo siguen haciendo, así que nosotros seguiremos trabajando día a día y luchando por una sanidad pública para todos.

 

Esta crisis sanitaria ha provocado miles de contrataciones. ¿No sé si cree que una vez pase la epidemia se podrán mantener algunas como muestra de que era necesaria una mayor inversión en personal?

La profesión enfermera ya venía acusando una falta de personal, el aumento de plantillas de Enfermería siempre ha sido una prioridad de Satse, de hecho, el año pasado realizamos una campaña de recogida de firmas para establecer una Ley de ratios adecuada, en la que Satse entregó más de 660.000 firmas. Según los estudios, en España, cinco enfermeras están cuidando de mil personas, lo que es una de las ratios más bajas de Europa.

 

De hecho, desde Satse se ha pedido una oferta de empleo (OPE) posterior para evitar una nueva fuga de profesionales de la Enfermería a otros países. ¿La ve posible?

Es posible y se deben convocar las OPEs para que los profesionales consigan una estabilidad laboral y se disminuya la eventualidad, que es una de las características negativas de nuestra profesión.  

 

Otra reivindicación para el tiempo posterior puede ser la figura de la enfermería escolar. ¿Cree que puede ser un factor clave para la postpandemia?

En el momento actual se ha visto la imprescindible labor de prevención y de educación para la salud que cumplen las enfermeras; así, la enfermera escolar debe ser una prioridad para el inicio del nuevo curso académico, ya que es una necesidad para niños, jóvenes, profesores, padres y madres.

 

¿Cómo ve el futuro de la profesión enfermera tras el COVID-19? ¿Cree que habrá cambios?

Para el futuro, veo una enfermera empoderada, con reconocimiento social y laboral, renovada y puesta en el lugar que se merece. Se ha demostrado que la enfermera es una profesional capacitada para la gestión y el liderazgo, así como preparada para formar parte de los órganos de decisión más importantes.