Niegan lavar el dinero de la droga, era para cultivar piñas

Pilar Muñoz
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Sólo una de las cabecillas de la trama de tráfico de drogas y blanqueo se sienta en el banquillo junto a su hijo y su pareja; 7 encausados han pactado y dos están huidos. La cabecilla dice que mandaba el dinero a Colombia para un cultivo de piñas

Niegan lavar el dinero de la droga - Foto: Pilar

La principal imputada en la operación ‘Jarete’ contra el tráfico de drogas y el blanqueo de capitales que ha acabado de nuevo en el banquillo de los acusados de la Audiencia de Ciudad Real (ha sido condenada en dos ocasiones) ha negado los cargos, como también su pareja y uno de sus siete hijos: no se dedican al tráfico de estupefacientes ni a lavar dinero de la droga, han declarado en la primera sesión del juicio.

¿Entonces a qué obedecen las cantidades que mandaban a Colombia? «Tengo un cultivo de piña allí», alegó María Leyda M. O., quien sólo contestó a preguntas de su abogada. En su casa, a últimos de 2016, los investigadores policiales hallaron 17.885 euros, una cantidad que justificó porque «me la dio mi hermano para comprar una furgoneta adaptada para mi hija».

 Según su relato, su hermano vino a España para hacer un negocio, que no se pudo llevar a cabo y «le pedí que me prestara el dinero». También, le pidió que «me colocara el dinero» para el cultivo de piña en Colombia y ayudar a la familia.

De los 12 encausados en la trama de tráfico de drogas y blanqueo de capitales destapada hace cinco años en Infantes y Valdepeñas sólo han acabado en el banquillo María Leyda M. O., su hijo Carlos Andrés M. O. y su pareja sentimental José Luis S.L. Los otros siete encausados que han comparecido han admitido el delito (tráfico de drogas) y han aceptado penas de entre uno y dos años y tres meses de cárcel.

Otros dos están en paradero desconocido. Por ello, el fiscal jefe, Luis Huete, que ejerce el Ministerio Público, pidió al Tribunal que adopte medidas cautelares, el ingreso en prisión de Víctor Hugo M. M. y Adriana Patricia L.M. porque existe «claramente» riesgo de fuga.

Estaban en libertad provisional y tenían que estar localizados; pero no han comparecido al juicio y se ha solicitado su búsqueda y entrada en prisión provisional. La abogada de la defensa se ha opuesto.

 La letrada también planteó al Tribunal en cuestiones previas la nulidad de todas las actuaciones a partir del testigo protegido por «indefensión» e impugnó las escuchas telefónicas tras sostener que se han vulnerado derechos.

El fiscal se opuso y refutó los motivos alegados por las defensas. Indicó que no se ha pedido una comisión rogatoria respecto a la mujer que pillaron en el aeropuerto de Madrid con casi 7 kilos de cocaína que debían ser entregados a María Leyda M. en su casa de Infantes. Fue expulsada de España, no ha sido hallada y, por tanto, no va a comparecer en el juicio. Respecto a que la defensa desconocía la identidad del testigo protegido, el fiscal jefe esgrimió la Ley Orgánica 19/94 tras argumentar las razones. En cuanto a las diligencias, aseveró que son «absolutamente pulcras», y sobre las escuchas telefónicas afirmó que se desgranan todos los indicios en la petición. El argumento utilizado por las defensas tiene un peso «muy escaso», a juicio del fiscal jefe. Las cuestiones previas se resolverán en sentencia.

El juicio continúa el miércoles tras las declaraciones de los encausados. María Leyda M. y su hijo Carlos Andrés M. sólo admitieron consumir cocaína, hasta dos gramos ella. El fiscal preguntó a su hijo cómo de un jornal podía surtirse de cocaína y mandar 13.623 euros a Colombia. «Era para la familia, pero no recuerdo mandar tanto».