Las obras de ejecución del estacionamiento disuasorio de la calle Lirio ya han comenzado, según confirmó a este diario el concejal de Urbanismo en funciones, Alberto Lillo. Tendrá capacidad para 84 vehículos y vendrá a dar servicio para el estacionamiento gratuito a los conductores de esta zona de la ciudad y a quienes se desplacen al centro. De hecho, la construcción de este estacionamiento se impulsó por el equipo de Gobierno municipal tras la pérdida de solares en los que tradicionalmente se venían aparcando los coches, ya que se trataba de terrenos pertenecientes a particulares que solicitaron la reversión de su uso. El último de estos estacionamientos que se perdió fue el de la explanada del Quijote Azteca, con capacidad para unos 250 vehículos, que dejó de tener dicha función en julio de 2017.
De este modo, el Ayuntamiento de Ciudad Real señaló su intención de propiciar la creación de estacionamientos gratuitos en terrenos públicos y de ahí que hubiera un estudio de suelo disponible que se tradujo en la cesión de este solar por parte de la Junta de Comunidades al Consistorio. Esta cesión se aprobó en la Junta de Gobierno de 2018 por un periodo de diez años, prorrogables por igual periodo.
Para acondicionar este solar de 2.058 metros cuadrados fue necesario redactar un proyecto de obra por parte de la Concejalía de Urbanismo que salió por un importe de 116.641,72 euros más IVA y que se adjudicó a la empresa Promoción y Gestión Vega del Guadiana por 75.970 euros más IVA.
Comienza la construcción del estacionamiento de calle Lirio - Foto: Rueda VillaverdeEl proyecto de construcción de este estacionamiento en superficie prevé actuaciones de desbroce y limpieza del solar, demolición de muros, así como la regularización del trazado con un trazado coherente con el fin de dotar a la calle de un itinerario accesible para los peatones y con espacio suficiente para el tráfico de vehículos. Las obras, que han arrancado de momento con la instalación de un vallado en la zona, prevé adecuar y completar la red de saneamiento, fundamentalmente con la incorporación de imbornales. También se procederá a soterrar las canalizaciones de las instalaciones eléctricas y de comunicaciones o la reposición de la señalización vertical y la incorporación de aquellas otras señales que sean necesarias.
Este disuasorio se suma a otros ya ejecutados por el equipo de Gobierno como el que se construyó en la calle Severo Ochoa, el de la carretera de Toledo o la culminación de Padre Ayala. En este caso, se trata del disuasorio más próximo al centro.