Las empresas de la provincia de Ciudad Real han recibido una inyección superior a los 30 millones de euros en ayudas directas concedidas exclusivamente por el Gobierno de Castilla-La Mancha. Así lo indicaron fuentes de la Consejería de Economía, quienes recordaron que el Gobierno regional ha abierto tres líneas de ayudas. La primera de esas líneas fue aprobada semanas después del confinamiento y el estado de alarma, por un importe de 80 millones de euros para micropymes y autónomos. El segundo decreto estuvo dotado con 60 millones para las pymes y autónomos de los sectores más afectados. La última línea de ayudas se dedicaron al inicio de actividad y mantenimiento de trabajadores autónomos, que se convocó con 1,9 millones pero que se amplió hasta los 10 millones. En total, la Consejería de Economía ha destinado 150 millones de euros en ayudas directas a las empresas de la región y una quinta parte, 30.886.800 euros han recalado en 14.745 empresas ciudadrealeñas. 

«Nuestro principal objetivo es que hayan sido un respiro para las más de 14.000 pymes y autónomos que han percibido esas ayudas en la provincia, sobre todo para aquellos que han visto directamente afectada su actividad con motivo del COVID», señaló la consejera de Economía, Patricia Franco, en declaraciones a La Tribuna de Ciudad Real. La consejera recordó que después de la tramitación del primer decreto se realizó una encuesta entre los beneficiarios, y en el colectivo de autónomos, un 65,5 por ciento dijeron estar bastante o completamente satisfechos con las ayudas, y uno de cada cuatro reconocían que habían servido para mantener su actividad; mientras que en las pymes fueron el 62,18 por ciento, y también una de cada cuatro micropymes señalaron la importancia para mantener su actividad. «Somos conscientes de que toda ayuda será insuficiente mientras no consigamos frenar la expansión del virus», señaló Franco, quien aseguró que desde el inicio de la crisis se han dispuesto ayudas directas para «los sectores más afectados en los momentos más duros de la pandemia, realizando los mayores esfuerzos presupuestarios y de nuevas líneas diseñadas al objeto de la crisis en el ámbito autonómico».

Hay dos sectores que destacan tanto por volumen de ayudas como por los beneficiarios. Se trata del comercio con 4.798 empresas que han recibido alguna ayuda, 9.795.300 se han concedido; y la hostelería, con 2.949 solicitudes y 7.423.200 euros en ayudas. «Son los más beneficiados porque las ayudas se han dirigido precisamente a los sectores más afectados por la crisis sanitaria», dijo la consejera. En este sentido, en el primer decreto, se dio cabida a todas las micropymes y autónomos de la región, independientemente de su actividad, porque «todas se vieron afectadas por las restricciones y limitaciones a su actividad en la primera ola». Mientras que en el segundo decreto, dotado con 60 millones de euros, las ayudas iban orientadas a los sectores más afectados por las restricciones en la tercera ola. «El requisito era una caída de facturación del 40% en los tres últimos trimestres del año con respecto al mismo periodo del año anterior», indicó la consejera. 

Franco se mostró confiada en que, de la misma manera que las ayudas han servido para amortiguar las pérdidas de muchas pymes y autónomos, «contribuyan también al mantenimiento del empleo». En este sentido señaló que «Castilla-La Mancha es la tercera región con mejor comportamiento interanual del desempleo, desde el inicio de la crisis sanitaria, y es la Comunidad Autónoma de todo el país que más empleo ha creado en los últimos 12 meses». Es, en definitiva, una situación que refuerza a la Consejería «para continuar trabajando en esta línea de apoyo».