«Va en el ADN de la ONCE vencer a las dificultades»

L.G.E.
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Incluso en 2020, a pesar de la Covid y la suspensión de sorteos, crecieron en número de trabajadores fijos

Después del confinamiento o Filomena, la ONCE tiene perspectivas positivas de recuperación de ventas. - Foto: Javier Pozo

En 83 años la ONCE no había afrontado una situación igual. «Fue la primera vez que se suspenden sorteos y que tiene que aplicar una solución de regulación de empleo, en este caso temporal». El delegado territorial de la ONCE en Castilla-La Mancha, Carlos Javier Hernández cuenta a La Tribuna lo que supuso para su organización el primer Estado de Alarma en la primavera de 2020 por el coronavirus. Desde el 14 de marzo hasta el 15 de junio las ventas fueron cero, lo que supuso una caída de ingresos en todo el año pasado de un 30,45% en Castilla-La Mancha. 

A pesar de esta situación tan compleja, la ONCE terminó el pasado año, el de la llegada del coronavirus, creando empleo indefinido. El balance fue positivo, con 209 contratos fijos más a diciembre de 2020. Y es empleo con valor añadido, pues el 58% de los trabajadores del Grupo ONCE tienen alguna discapacidad y en el caso de la venta de lotería es el 100%. 

¿Y eso cómo se consigue? Hernández da varias claves. Una de ellas es económica, pues la ONCE venía de un período de cuatro a cinco años de crecimiento consecutivo. Otra de las claves es su filosofía de «poner en el centro a las personas» y por eso «lo que sí se ha hecho es asumir el compromiso de seguir dando estabilidad, empleabilidad». Y quizá hay otra clave más, que es la experiencia que tiene la ONCE de salvar situaciones complicadas. «Siempre ha habido dificultades a lo largo de la historia, va en el ADN de la ONCE vencer a las dificultades», proclama.

En la ONCE enseñan a las personas ciegas el manejo de un perro guía. En la ONCE enseñan a las personas ciegas el manejo de un perro guía. - Foto: José Miguel EsparciaHernández recuerda, por ejemplo, que la ONCE nació en plena Guerra Civil, de un grupo de personas que se dedicaban a la mendicidad y que «quisieron dar un paso y dignificar la vida de las personas con el trabajo». El cambio de la peseta al euro fue un reto para todos, pero por ejemplo para sus vendedores no solo supuso adaptarse al uso y cálculo de la moneda, «sino al tacto» o la incorporación de nueva tecnología con el despliegue de los terminales de punto de venta.

El coronavirus ha supuesto una carrera de obstáculos para la ONCE. Hernández recuerda que cuando se volvió a la venta en la calle en junio de 2020 «salió la gente con mucha esperanza, ilusión, empezamos a intentar remontar». También para el período navideño se preveía un repunte, pero después llegó Filomena. «Fue otro golpe, durante una semana nuestros vendedores no podían estar en la calle, por los riesgos y porque no había mucha gente», apunta. Señala que desde Semana Santa «parece que los datos son más halagüeños y nos están permitiendo estar por encima de lo previsto».

Dentro del Grupo ONCE están también las empresas del grupo Ilunion, con 50 líneas de actividad económica diferentes. Según el sector han tenido que afrontar la crisis de manera diferente. Hernández cuenta que por todo el país tienen hoteles que durante la peor fase de la pandemia se utilizaron como apoyo hospitalario o para dar alojamiento a profesionales sanitarios. Señala que ahora «han vuelto a coger su ritmo de acoger turistas». Y aunque no en todos los sitios van igual, apunta que este verano «sí se ha notado ese buen comportamiento, sobre todo por el turismo nacional».  También tienen lavanderías que en 2020 realizaron una labor fundamental para la desinfección y lavado de la ropa de hospital, pero que también notaron la caída de encargos del sector hotelero. 

«Detrás de esa pequeña acción de comprar un producto de la ONCE, lo que hay son vidas»

Nave de logística y empaquetado de Ilunion en Cabanillas del Campo.Nave de logística y empaquetado de Ilunion en Cabanillas del Campo. - Foto: Javier PozoLa crisis del coronavirus ha supuesto un reto para dar atención a sus socios. «Hemos tenido que reinventarnos», apunta. Se hicieron más de 15.000 llamadas de teléfono «para ver cómo está nuestra gente». Y a través de videollamadas pudieron mantener apoyos educativos, clubes de lectura o incluso  ensayos del grupo de teatro. 

Desde Semana Santa empezaron a retomar más actividades de manera presencial y  prácticamente desde septiembre se ha vuelto a la normalidad. «Adiestrar a una persona ciega en manejo de bastón no se puede hacer a distancia o atender a los alumnos una vez que volvieron al aula», explica.

«Detrás de esa pequeña acción de comprar un producto de la ONCE, lo que hay son vidas», apunta el delegado de la ONCE en la región.
«Detrás de esa pequeña acción de comprar un producto de la ONCE, lo que hay son vidas», apunta el delegado de la ONCE en la región. - Foto: David Pérez
Todos los años llaman a sus puertas personas que han perdido la visión por una circunstancia sobrevenida o familias con hijos con discapacidad visual. El pasado año se incorporaron 85 afiliados nuevos en Castilla-La Mancha y 2.139 a nivel nacional. Por eso Hernández reivindica todo lo que supone comprar un cupón o un 'rasca y gana'. «Detrás de esa pequeña acción de comprar un producto de la ONCE, lo que hay son vidas de personas», apunta.