7 de cada 10 obesos mórbidos intervenidos recuperan la salud

Nieves Sánchez
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La Unidad de Obesidad cumple dos décadas con una media de 50 operaciones al año. Las enfermedades y patologías asociadas a su exceso de peso mejoran o desaparecen a cinco años en el 70% de los pacientes

7 de cada 10 obesos mórbidos intervenidos recuperan la salud - Foto: Pablo Lorente

Hay resultados que invitan a la esperanza dentro del caos, y técnicas que ayudan a muchas personas a aligerar el dolor y la carga que soportan por estar ceñidos a un gran peso. El 70 por ciento, o lo que es lo mismo siete de cada diez personas que padecen obesidad mórbida o extrema y se someten a cirugía bariátrica en el HGUCR, por las técnicas de bypass gástrico y manga gástrica o gastrectomía tubular, recuperan a cinco años su estado de salud. El jefe de Cirugía del HGUCR, Jesús Martín, explica a La Tribuna que las enfermedades asociadas al síndrome metabólico que desarrollan estos pacientes por su excesivo peso «mejoran muchísimo o desaparecen por completo en ese periodo de tiempo, dependiendo de cada paciente». La obesidad mórbida lleva aparejada, además de exclusión social, problemas de corazón y respiratorios; problemas renales y hepáticos, apneas, colesterol o diabetes.

Para hablar de fracaso o éxito se utiliza el exceso de peso perdido, es decir el paciente tiene que haber perdido más del 50% de lo que le sobra. «En estas personas todo tratamiento que no es cirugía tiene una tasa de fracaso del 97%, mientras que las técnicas que se utilizan a nivel mundial y en este hospital, cuentan con una tasa de resolución a cinco años de más del 70%», asegura el facultativo.

La obesidad mórbida es por definición la que padece una persona que pesa el doble de su peso ideal o con un índice de masa corporal (IMC) superior a 40. Un varón que mida 1,75 metros y tenga un peso ideal de 80 kilos tendría que pesar 160 para ser obeso mórbido, como si llevase encima a un gemelo pero con sólo un corazón, dos pulmones, un hígado, un esqueleto y un sistema arterial. Existe además una obesidad extrema, que es la de aquellas personas que pueden llegar a pesar el triple de su peso ideal o que tienen un IMC igual o superior a 50, están encamados y requieren de grúas para ser movilizados. Un 25% de los obesos que opera el equipo de Jesús Martín al año son súper mórbidos.

El Hospital de Ciudad Real cumple este año dos décadas practicando con éxito este tipo de cirugías. Una alternativa para el sobrepeso en aquellos casos en los que fracasan otros tratamientos médicos y dietéticos y que permite corregir «entre el 75 y el 80 por ciento de los casos cuando es por bypass gástrico y el 50% cuando es por manga gástrica», puntualiza el jefe de cirugía del HGUCR, centro que lidera el número de intervenciones realizadas en Castilla-La Mancha. En concreto, las 850 cirugías que se han realizado desde el año 2000 suponen el 80% de la actividad total de la región desde ese año, siendo el Hospital de Ciudad Real el primero en la comunidad y uno de los pioneros en España en implantar el programa de cirugía de la obesidad para realizar este tipo de intervenciones con abordaje laparoscópico (mínimamente invasivo), al suponer una demanda creciente.

De ahí que el equipo de Jesús Martín acumule la mayor experiencia en este tipo de procedimientos y unos parámetros de calidad, en cuanto a índices de mortalidad y morbilidad, dentro de los mejores estándares del país. «El resto de hospitales de la comunidad donde se realizan estas cirugías, como el de Alcázar de San Juan, empezaron como mucho cinco hace años, frente a los veinte años de experiencia con los que contamos en Ciudad Real», apunta Aurora Gil, adjunto de Cirugía General,

La Unidad que dirige Martín opera al año una media de 50 pacientes. En 2019 fueron 49, y suele haber entre 80 y 100 en estudio para ser intervenidos. «Se requiere de la colaboración de muchos servicios, como endocrinología o psiquiatría, por lo que las pruebas tardan en completarse alrededor de un año y sin un informe favorable de psiquiatría no podemos operar», explica el cirujano del equipo, Fernando Martínez de Paz, que confirma que el tiempo de espera es imprevisible.

perfiles y criterios. Las intervenciones dependen de la presión asistencial, es decir de la oferta de equipos. «ahora mismo no estamos trabajando al 100%  porque no hay suficiente oferta de equipos y tenemos que priorizar en quirófanos los casos urgentes, pero eso no significa que haya lista de espera», afirma Martínez de Paz.

El perfil generalizado se corresponde con mujeres (60%), frente al 40∞ de hombres, con unos 43 años y con un índice de masa corporal de 49,28. En todos ellos, añade el facultativo, el factor básico es que comen en exceso, sin que sea desorbitado, ingieren una cantidad de comida que no queman y van acumulando. Un obeso mórbido tiene una pérdida de esperanza de vida de unos 15 años respecto a los que no lo son.

Los criterios para ser candidato a cirugía de la obesidad consisten en llevar más de cinco años con el problema, haber hecho múltiples intentos de tratamiento farmacológico, dietético y haber fracasado en todos ellos.  Además de no superar los 65 años y no estar por debajo de los 18. Estos pacientes tampoco pueden tener dependencias a las drogas, alcohol o tabaco.