Gustavo Molina afronta este domingo, en su silla de atletismo, una de las citas más importantes de su calendario competitivo, el Maratón de París. Será la segunda vez que compita de una de las pruebas de más prestigio de Europa, que recorrerá los lugares más emblemáticos de la capital francesa, con salida y llegada en el Arco del Triunfo, y recorrido pasando por los Campos Elíseos. Plaza de la Bastilla, catedral de Notre-Dame o la Torre Eiffel. 

El infanteño afincado en Poblete llega en un buen momento de forma y con buenas sensaciones, por lo que su objetivo es estar entre los diez primeros en una carrera donde el nivel de los participantes será muy elevado.

«Mi objetivo es bajar de la hora y cuarenta minutos e intentar hacer un ‘top 10’, aunque dudo de la marca porque no es un recorrido muy rápido, con mucho adoquín y cuestas», resume Molina, que en cualquier caso se muestra muy motivado ante una prueba «muy bonita».

Gustavo Molina viajó ayer en avión rumbo a París, donde el domingo, con salida a las 8 horas, espera firmar una gran carrera y, sobre todo, disfrutar de una cita con solera.