Varias mesas tuvieron que habilitar en la sede del Sescam para que cupieran los sesenta representantes que forman parte del Eje de Sociedad de Bienestar que se constituyó esta mañana. Sus propuestas se verterán en el nuevo Pacto por el Crecimiento y la Convergencia de Castilla-La Mancha, que abarca del año 2019 a 2023. Quizá por eso de que era su constitución, hubo quien sacó el móvil para fotografiar sus primeros pasos.

La mesa la presidió la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, que explicó a los medios antes de entrar que hay una buena representación del Gobierno regional (está por ejemplo el viceconsejero de Educación o la directora general de Humanización y Atención Sociosanitaria), pero que también están asociaciones del Tercer Sector o colegios profesionales implicados.

Sánchez señaló que la Sociedad del Bienestar con sus tres grandes patas, la Sanidad, Educación y Servicios Sociales, constituyen uno de los ocho ejes de este pacto y permite a la vez «luchar contra la desigualdad» y contribuir al crecimiento económico de la región y a crear empleo. Este es uno de los ejes nuevos del Pacto, tal y como precisó.

En el primero de los puntos del orden del día se iba a hacer un «planteamiento objetivos generales de cada una de las áreas: educaiva, sanitaria, social». En el segundo de los puntos se concretó una «metodología» para que todos los actores de este eje puedan hacer llegar sus propuestas.

La consejera de Bienestar Social recordó que además en cada uno de estos ejes se tiene que tener en cuenta otras áreas trasversales, es decir, que deben estar presentes en todas las políticas del Gobierno que se aborden con este Pacto. Esas áreas trasversales son las de despoblación y reto demográfico, perspectiva de género, inclusión de personas con discapacidad y era digital.