Loro se ve cubista en el Elisa Cendrero

D. F.
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El artista daimieleño inaugura el próximo 6 de septiembre la exposición 'Cubismo en Ciudad Real', después de haber apostado en año anteriores por el surrealismo y por el paisajismo

Loro se ve cubista en el Elisa Cendrero

El artista daimieleño Eusebio Loro ha dado una nueva vuelta de tuerca a su quehacer pictórico que presentará en público el próximo 6 de septiembre en el Museo Elisa Cendrero, por medio de la exposición Cubismo en Ciudad Real.

Loro es un artista que evoluciona en varias direcciones a la vez y que tanto puede entregarse al paisajismo, como dar paso a un surrealismo desgarrado y que ahora se reemplaza con una nueva variante creativa en los terrenos de la creación cubista.

En dicho acto, que dará comienzo a las 20.00 horas, Loro contará con la presencia de la escritora y colaboradora de La Tribuna, Nieves Fernández.

En una conversación con este diario, Loro detalló que su propuesta para el Museo de la calle Toledo está compuesta por 22 obras, a las que se sumará la número 23 en espera de la evolución que tenga la exposición.

El artista, que se muestra emocionado por la posibilidad, de estar en una de las salas más destacadas de la capital en un edificio muy vinculado a las vanguardias del siglo XX, precisa que tiene «perfectamente planificado donde va cada obra», puesto que cuando recibió la confirmación de que se le concedería la sala empezó a trabajar sobre ello.

«Desde que reinauguraron el Museo después de tanto tiempo y vi aquella sala, quise exponer ahí y he tenido la suerte de que me la han concedido enseguida», reconoce Loro.

Sin embargo, el artista matiza que su interés por el cubismo no viene de ahora, sino de sus inicios en el mundo de la pintura. «Después de haber pasado por varias etapas, como el figurativismo, el surrealismo, llego al cubismo, pero en realidad eso ya lo había pasado, mi primera etapa como pintor fue cubista», insiste el artista daimieleño, quien evoca que «de niño participé en un concurso del Ayuntamiento de mi pueblo, y con una guitarra saque una guitarra con unas formas que son cubistas, a pesar de que nunca había visto hacer nada a ningún pintor cubista», reflexiona. En aquellos tiempos, refiere que «pintaba obras de 40 o 60 centímetros, que eran una forma de abstracción diferente y a la gente le gustaba, las regalaba incluso». En su primera exposición, que realizó en el Ayuntamiento antiguo de Daimiel , esa fue ya la temática que eligió.

La mayor parte de las obras que forman esta muestra son de un tamaño medio y grande, aunque también hay otros lienzos de gran formato, hasta 5 metros, en los que el autor tiene depositadas sus esperanzas de conseguir su adquisición por parte de algún Ayuntamiento o alguna otra institución pública.

La muestra es casi todo de obra reciente y muy reciente, «desde que supe que iba a exponer aquí, ha sido una fuente de inspiración tal, que he llegado a pintar hasta dos cuadros diarios».

A pesar de todo, Loro precisa que el cubismo genera un juego con el espectador, «aunque te distorsiona, sabes que si yo te pinto, te vas a reconocer, y esa es la gracia». Sin que por ello deje de introducir los elementos surrealistas que han caracterizado su etapa inmediatamente anterior, concluida hace menos de un año.