El Vestas Alarcos conquistó un trabajado empate ante el líder, el Cisne, en un partido que pudo decantarse para cualquiera de los dos bandos y que viene a reflejar la tremenda igualdad que preside la categoría. El conjunto de Javier Laguna fue capaz de remontar cuatro goles a los gallegos, líderes de la tabla, y llegaron a ponerse dos arriba (30-28), pero un siete metros anotado por Javier Vázquez a escasos segundos del final y una parada de Jorge Villamarín, exjugador del conjunto alarquista en un lanzamiento de Beret en la última acción del encuentro dejaron el choque en tablas.

Difícil es saber si fue el resultado más justo, pero lo cierto es que los dos equipos pudieron ganar en un partido de alternativas y altibajos.

El regreso de Martín Molina tras su larga fue la nota más destacada en el inicio para un equipo que andaba necesitado de zurdos y más tras las salidas de Josh da Silva y Manu Díaz.

Un punto con sabor agridulce - Foto: Rueda VillaverdeComenzó muy bien el conjunto ciudadrealeño, precisamente con dos goles del jugador argentino más otro de Eloy Krook.

Respondió el Cisne con otro parcial de 0-3, pero con una fuerte defensa el Vestas Alarcos llevó el timón del choque en su fase inicial, con César Beret a los mandos, y logró ventajas en torno a los tres goles. 

El Cisne no se puso nervioso y aprovechó un pequeño bajón de los locales para igualar la contienda (11-11, m. 22), haciendo daño desde la posición de pivote. 

Un punto con sabor agridulce - Foto: Rueda VillaverdeFrank Cordiés sacó al Vestas Alarcos del atasco ofensivo, pero para entonces el líder demostraba síntomas ya una gran mejoría ofensiva, superando el entramado defensivo de los locales.

De hecho, del 12-11 se pasó al 12-15 y es que a los de Javi Laguna les costaba un mundo ver portería y al descanso se llegó ya con un preocupante 13-16.

Los ataques se impusieron a las defensas en el arranque del segundo periodo  y así el Cisne mantuvo esa ventaja de dos y tres goles. Cuando el choque amenazaba con romperse (20-24, m. 41), el Vestas Alarcos reaccionó con un parcial de 3-0, que pudo haber sido aún mayor, pero Jorge Villamarín, un viejo conocido de la afición alarquista, hizo de las suyas con varias intervenciones de mérito.

Un punto con sabor agridulce - Foto: Rueda VillaverdeEl Cisne se había atascado en ataque y Javier Fernández ‘Jabato’ solicitó tiempo muerto (23-24, m. 46). Jorge Villamarín se había convertido en un muro y mantenía al Cisne a flote, pero el choque se encaminaba a un final de infarto.

A ocho minutos para el final el electrónico reflejaba un empate a  26-26, anticipo de la primera ventaja del Alarcos después de mucho tiempo.

Eloy Krook puso el 30-28, pero faltaba mucha tela que cortar y el líder entonces demostró su condición. Otro viejo conocido, Andrés Sánchez, firmó el 30-29 . No pudo marcar el Vestas Alarcos y el Cisne no desperdició un siete metros para firmar el que sería el definitivo 30-30, pues Jorge Villamarín adivinó las intenciones de Beret en esa última jugada. 

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