El cielo gastronómico de Castilla-La Mancha brilla algo más esta semana en la que se ha alcanzado la cifra de ocho restaurantes con estrellas repartidas por todas las provincias de la región. Dos hay en Toledo, dos en Guadalajara, uno en Albacete, otro en Cuenca y, por primera vez, dos locales alcanzan la constelación de Michelin en Ciudad Real, con Retama, que la mantiene tras lograrla en 2019, y Coto de Quevedo, que la logra por primera vez. Se trata de una muestra de que la gastronomía de la provincia ha cambiado, con un mayor trabajo de la calidad, y que podría servir para atraer turismo a los municipios ciudadrealeños.
«Es un buen camino en la provincia y hay que dar las gracias y felicitarlos», dijo el presidente de la Asociación Provincial de Hostelería, José Crespo. De hecho ya se ha dado la enhorabuena desde la organización a los restaurantes por el buen papel logrado ayer, al que se suma que Ciudad Real capital tenga su primer Bib Gourmad, el segundo de la provincia, ya que también lo tienen Las Musas, en Campo de Criptana.
«Desde la asociación estamos orgullosos de pertenecer a un gremio que triunfa en Ciudad Real y en la región», dijo Crespo, orgulloso de ese cielo estrellado y especialmente por José Antonio Medina, el chef del Coto de Quevedo, «que tiene una vocación por encima de la media». «Es una estrella muy merecida», dijo.
«Hace ya tiempo que todos venimos queriendo que esto fuera sucediendo», dijo Crespo, al plantearle el cambio de que en solo dos años, Ciudad Real haya pasado de cero a dos estrellas. Recordó que se está trabajando desde hace tiempo en avanzar en la calidad de la restauración y para ello se han dado pasos, como los premios de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y los de la propia organización.
«El nivel de la gastronomía nos destaca como un mejor destino turístico», señaló el presidente de los hosteleros, antes de recordar que estos reconocimientos sirven para quitar ideas como que «solo se come bien en el norte».
Calidad al mejor precio - El Mesón Octavio logra el Bib Goumard
Más allá de las estrellas hay muchos motivos de alegría en la Guía Michelin 2022 para la gastronomía de la provincia. Por ejemplo, el Mesón Octavio logró el segundo Bib Gourmard para Ciudad Real, tras el alcanzado por el restaurante Las Musas de Campo de Criptana. Se trata de un llamativo galardón, en el que la mascota de Michelin aparece relamiéndose, y que reconoce a los establecimientos que sirven una cocina de calidad a precios ajustados, con un entrante, un plato principal y postre por menos de 35 euros.
«Significa estar en una posición en la guía importante tras 24 años de trabajo con el objetivo de poner la gastronomía de Ciudad Real en las guías y con un trabajo de esfuerzo y dedicación por la gastronomía», explicó Belén García Castro, quien no esperaba recibir este galardón y que descubrió por la noche cuando estaba viendo la gala. Los García Castro, ella, con José y Aurora, regentan este restaurante de tono familiar que se ha esforzado por lograr este reconocimiento y que «han perseguido» desde su nacimiento. De hecho, Belén García espera que la estrella Michelin llegue tarde o temprano a la capital, a ser posible de su mano. Hay que recordar que ya tiene un Sol en la guía Repsol.
Para García Castro este reconocimiento supone un escalón más, tras el tiempo difícil de la pandemia. Así, destacó que el galardón implica que un inspector anónimo ha visitado el establecimiento y, por el trato y los platos, ha decidido que «hay una relación de calidad-precio muy interesante». «A veces, solo a veces, encontramos un restaurante como este, donde tras cada bocado recordamos la cocina que elaboraban nuestras madres y abuelas», dice la reseña.
Este galardón implica que Ciudad Real tiene menús para todos los gustos y amplía el mapa gastronómico. De hecho, hay siete restaurantes citados en la guía, además de las estrellas y los dos con el Bib Goumard, en la edición 2022 también aparecen La Encomienda, Epílogo y San Huberto.