El mes de octubre fue muy cálido y normal en cuanto a las lluvias que dejó; novimbre, muy frío y seco; y los días que van de diciembre apuntan a un mes normal en los termómetros y extremadamente seco en las precipitaciones: en todo lo que va de mes, el Observatorio Meteorológico de Ciudad Real apenas ha recogido dos litros por metro cuadrado. Una falta de lluvias que la Aemet prevé que se pueda repetir en la estación que se estrena a las 15.59 horas.
Las estimaciones que lanza la Agencia Estatal de Meteorología es que los próximos meses vengan marcados por temperaturas normales, con valores que rondarán los seis grados en enero de media, los ocho en febrero, y superarán los 11 en marzo; meses que serán secos a la hora de hablar de lluvias. Algo que ya empieza a ser habitual. Este año que llega a su fin no marcará una excepción. En la capital, durante el otoño, apenas han caído 80 litros por metro cuadrado de precipitaciones desde el 22 de septiembre, con la mitad de esas precipitaciones concentradas en un solo día, el 30 de octubre. El año pasado fueron más de 90 litros por metro cuadrado los que dejó la estación, y el anterior, más de 130.
En los pantanos, las reservas de agua rozan el 26% cuando lo habitual en la última década era llegar al invierno con el doble de reservas, con algo más del 50 por ciento. Eso sí, la previsión es que esta semana los ciudadrealeños tendrán que echar mano de los paraguas, sobre todo, a partir del miércoles, cuando se esperan tormentas, y por lo menos hasta el domingo, hasta cuando se mantendrán los cielos cubiertos.
Las temperaturas con las que se estrena el invierno no dejarán apenas cambios: las máximas se mantendrán, tras un leve repunte que se espera hoy, con máximas de hasta 17 grados, entre los 12 y los 14 grados. Las mínimas, desde hoy, también crecen, e irán de siete a diez grados. Valores altos para despedir el año y que llegan tras un otoño que dejó cerca de 30 grados en octubre y con mínimas que apenas han bajado de los cero grados: la última vez, el 14 de diciembre, con una décima bajo cero.
Más de 600.000 daños en viviendas por el tiempo
Las DANAS o Depresiones Aisladas en Niveles Altos, las Tempestades Ciclónicas Atípicas (TCA) como Klaus, Flora o Xynthia, la nevada de Filomena o la erupción volcánica que aún sigue activa en La Palma son fenómenos de la naturaleza que han tenido efectos devastadores en los últimos tiempos en España. Como consecuencia de ello, muchas viviendas de familias se han visto afectadas. Aunque estos son algunos ejemplos de los fenómenos más extremos, todos los años se producen eventos atmosféricos que, sin ser tan devastadores, tienen un gran impacto en los hogares españoles.
Con el objetivo de conocer cómo afectan los eventos climatológicos a las familias y de concienciar sobre el aseguramiento de los hogares españoles, Línea Directa ha elaborado el informe El impacto de los fenómenos atmosféricos en el seguro del hogar desde una perspectiva social, en el que se destaca que el 36% de los hogares castellanomanchegos han estado afectados, de alguna forma, por un evento climatológico en los últimos 10 años, lo que equivale a más de 637.000 viviendas en esta comunidad autónoma según la estimación del parque de viviendas del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
Entre estos daños por incidentes atmosféricos, los más comunes son por viento (40%), inundaciones por lluvias (39%), daños por granizo (24%), por nieve (18%), por rayos o tormentas eléctricas (12%) y daños sísmicos (6%). Aunque es cierto que perder la casa como consecuencia de una inundación es el fenómeno más temido por parte de los españoles con un 26%, seguido muy de cerca por los terremotos (25%), huracanes (16%), rayos o tormentas eléctricas (16%), nieves (10%) y granizo (8%).