Agustín Cantero y el espíritu de Ciudad Real

Diego Farto
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«El pandorgo tiene que ser una persona arraigada, que defienda sus tradiciones, vinculada a la ciudad, porque hay muchas tradiciones que defender»

Agustín Cantero y el espíritu de Ciudad Real - Foto: Tomás Fernández de Moya

Agustín Cantero, nacido en Ciudad Real, es empresario y fue elegido pandorgo en el 2002. Actualmente preside la Hermandad de Pandorgos, que en este 2020 celebra los 40 años transcurridos desde la recuperación de esta figura, aunque sea de forma atenuada.

Este año se conmemoran los 40 años transcurridos desde la recuperación de la figura del pandorgo, ¿qué planes había antes de la pandemia?

Nuestros planes incluían muchas cosas que hacer, muchas cosas que innovar, pero todo eso al final hubo que desactivarlo y lo mejor es no acordarnos de lo que íbamos a hacer e intentar celebrarlo de la mejor manera posible. 

¿Qué supone para la Hermandad alcanzar esos 40 años?

Para nosotros es importante. La Pandorga viene del siglo XVI, es una fiesta que ha estado apareciendo y desapareciendo en función de la economía de la ciudad y de la economía del pandorgo, del que pagaba la fiesta. Nunca se había conseguido estar tantos años seguidos como los que acabamos de cumplir. Hace 40 años que lo recuperamos y nunca en la historia se había conseguido un periodo tan largo.

¿Qué actividades van a desarrollar esta semana?

Fundamentalmente lo recordaremos en nuestra casa porque las actividades que vamos a tener son las que se pueden hacer en estas circunstancias. Vamos a hacer la imposición del pañuelo de hierbas, sólo que este año va a ser a varias figuras, además de a Javier Segovia y la estatua del pandorgo,  como Don Quijote, Sancho, Alfonso X El Sabio, Cervantes... figuras que tienen que ver con la historia. El día 31 por la tarde iremos a misa. Hemos solicitado al cabildo que nos autorice a llevar un ramo de flores a la Virgen, que a fin de cuentas es la promotora de esta fiesta. No podemos dejar de hacer un pequeño homenaje, una pequeña visita a nuestra Virgen. La situación es seria y no se permite la aglomeración de gente.

¿Alguna de esas ideas que se han quedado en el tintero podrían trasladarse al 2021?

En principio, el 40 aniversario es un año, podríamos hasta julio del año que viene, pero no sabemos qué va a pasar. Si volviera la normalidad probablemente hiciéramos algunas cosas antes del nombramiento del siguiente pandorgo.

¿Cómo es el pandorgo del siglo XXI?

Se ha ido adaptando con los años, pero la figura del pandorgo sigue siendo la misma. Siempre ha sido un personaje emblemático de la ciudad, aquella persona que antaño disponía de dinero porque era el que tenía que pagar la fiesta. Ahora tratamos de que sea algo muy parecido, evidentemente no es lo mismo, porque ya no es necesario que tenga un capital, pero sí que sea una persona arraigada, que defienda sus tradiciones, que esté vinculada a la ciudad, porque hay muchas tradiciones dentro de la ciudad que se tienen que seguir defendiendo.

¿Cómo estaba la búsqueda de pandorgo cuando se declaró la pandemia?

Ya había quien se había ofrecido. Hay mucha gente que quiere serlo y en ese momento ya había varias personas preguntado cómo y de qué manera tendrían que actuar.