La A-4 (Autovía del Sur), el tramo oeste de la N-430 (entre Puebla de Don Rodrigo y Ciudad Real) y la N-401 (carretera que une la capital con Toledo) son vías prioritarias para la Guardia Civil de Tráfico por la circulación que soportan y la accidentalidad registrada, asegura a La Tribuna el capitán jefe del Subsector de Tráfico, Pedro Manuel Puerta, quien la víspera del mayor éxodo del verano en las carreteras avisa de que el hecho de que hoy no haya drones no quiere decir que mañana no los traigan y sobrevuelen las carreteras de la provincia. El mismo aviso sirve también para el Pegasus, el helicóptero de la DGT que ha volado hace unos días sobre la red provincial para controlar y vigilar la circulación con el fin de prevenir accidentes.

La operación especial de la DGT ‘15 de agosto’, que comienza hoy a las tres de la tarde, es la más importante del verano por el volumen de tráfico que registra en las carreteras (se juntan los que regresan de sus vacaciones con los que las inician y los que se desplazan con motivos de las fiestas patronales).

Por ello, se restringen los días del descanso semanal del personal de la Guardia Civil de Tráfico para que todos los agentes disponibles estén de servicio durante la operación especial de la DGT, entre el 14 y el 18 de agosto, con una previsión de 280.000 desplazamientos en las carreteras provinciales.

Durante estos días se van a intensificar los controles de alcohol y drogas en las vías de la provincia y también en las inmediaciones de los municipios que celebran sus fiestas patronales.

En cuanto a los drones de la DGT, el capitán Puerta indica que de momento no han destinado ninguno a Ciudad Real, aunque sí hay previsión de contar con ellos en próximos meses, sin descartar que puedan sobrevolar las carreteras de la provincia este puente, fin de semana o en cualquier otra ocasión, ya que se encargan «prioritariamente de la vigilancia del tráfico en las carreteras donde hay más circulación y en aquellos tramos donde el riesgo de accidentabilidad es mayor».