Feria para los visitantes

D. F.
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Los visitantes que acuden a Ciudad Real se sorprenden de encontrar actividades de la feria, como el baile del vermú o los Mahouñaneos, en plena zona centro y de poder bailar a mediodía durante varias horas en la plaza Mayor

Feria para los visitantes - Foto: Pablo Lorente

El baile del vermú es toda una sorpresa para los forasteros que se acercan a disfrutar de la feria de Ciudad Real, un público al que los camareros que trabajan en las diferentes barras del recinto detectan con rapidez.

Por ejemplo, Fran Morales, responsable de la barra de El Portalón, quien detalla, «los que son de Ciudad Real muchas veces los conoces, además ellos conocen el sitio, pero también ves que hay mucha gente de paso». A los forasteros se les nota en que «preguntan cómo funciona el vermú, lo qué pueden pedir, cuánto cuesta».

En cambio, los viajeros tampoco hacen mucho comentarios sobre el conjunto de la feria, más allá de que «les gusta el baile del vermú». Morales subraya el esfuerzo que se ha hecho este año, «hemos traído tres orquestas con mucha variedad de música», dentro de una aspiración a que la fiesta sea para todos los públicos, al tiempo que se ha contratado un empresa de seguridad para evitar molestias a quienes acuden al vermú.

A nada que se indaga entre los corrillos formados en distintos sitios aparecen personas llegadas de otras ciudades, como el sevillano Francisco Melero, quien de todos modos es ya un buen conocedor de la feria de Ciudad Real, «Mi novia es de aquí», con lo que acude prácticamente todos los años y en su opinión «la verdad es que no añadiría nada, yo vengo en agosto, desde la Pandorga hasta la feria y creo que no le falta nada», asegura convencido.

Una visitante novata, recién llegada a Ciudad Real y a la plaza Mayor (acaba de coger su primer vaso), es la albaceteña Lucía Sánchez, «de momento no he visto más que esto, pero me encanta que la feria esté en el centro de la ciudad», se lanza. En cualquier caso, la joven está dispuesta a recorrer los distintos escenario de las celebraciones y remetar la fiesta en el recinto ferial de La Granja y en las casetas nocturnas.

La ‘verdadera culpable’ de la primera visita de Lucía Sánchez a Ciudad Real es su amiga Mirella Fernández, también albaceteña, quien este año empezó a trabajar en Ciudad Real, por lo que se propuso conocer con sus amigas cómo son las fiestas en esta ciudad, para ella lo que se va relevando es también una agradable sorpresa.

De la provincia. Una visión más tranquila es la que tiene el porzuniego Demetrio Morales, «no soy muy de venir a la feria de Ciudad Real, vengo muy de cuando en cuando», de hecho sus planes para el día de ayer era pasar un rato en el baile del vermú y después volver a Porzuna con la familia.