El Boletín Oficial de la Provincia ha publicado las tablas salariales del convenio de hostelería para la provincia de Ciudad Real, firmado el pasado mes de enero, y en el que se fija que el incremento de sueldo en este año para los más de 6.000 trabajadores de la hostelería en la provincia será de un 3,8 por ciento. Se trata de un aumento desglosado en el 2,6 por ciento pactado en el convenio más el IPC real del año 2018 y que se fijó en un 1,2 por ciento, por lo que los empleados de bares y restaurantes tendrán este incremento tanto en el salario base como en el resto de conceptos.

La secretaria de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo, Cristina Miranda, recordó que el pasado año no hubo incrementos, ya que se estaba negociando el convenio desde el inicio de 2018 y que las negociaciones se cerraron a finales de diciembre, lo que hizo que se optara por trasladar el incremento de los sueldos al año siguiente. «Este incremento de pronto puede ser un poco alarmista pero compensa», apuntó Miranda. «No conlleva atrasos del año pasado pero sí incrementos desde el 1 de enero de 2019», dijo la secretaria de la organización empresarial. Hay que tener en cuenta además que el convenio, en vigor, hasta 2020, plantea el próximo año una subida salarial del IPC real de 2019 más el 0,7 por ciento, por lo que habrá que esperar a ese IPC para conocer el siguiente porcentaje de aumento.

Los empresarios «tienen que realizar la actualización a las tablas de forma inmediata», recordó Miranda, para señalar que «muchos empresarios no han esperado a que se publicaran y ya han realizado el incremento en la primera nómina» para evitar el abono de atrasos. Las cifras marcan que el salario base en el menor nivel será de 931,01 euros y en el primero de 1.027,20 euros. Además aumentan el plus de asistencia y permanencia mensual, 88,62 euros; o la nocturnidad a 5,50 euros por jornada o conceptos como la manutención, el alojamiento...

Desde la asociación apuntaron que desconocen si un incremento de este tipo podría repercutir en el precio final al consumidor aunque recordaron que «los empresarios vienen de una época que se han contenido en los precios pese a que los gastos y costes fijos han subido exponencialmente», por ejemplo la luz. «Cada empresario en su empresa hará sus cálculos y verá si tiene que repercutirlo», apuntó Miranda.